Los peregrinos verán un nuevo Camino de Santiago a su paso por Sarria a final de año. El taller de empleo que rehabilita los muros de cierre del campo de la feria y el cementerio municipal retomó los trabajos a comienzos de este mes. Formado por 20 alumnos, paró sus actuaciones el pasado 13 de marzo debido al confinamiento y continúa hasta diciembre.
El 'obradoiro' está financiado por la Consellería de Economía, Emprego e Industria y tiene dos especialidades. Una de ellas, albañilería de urbanización, casi completó la limpieza de los depósitos de agua y el acondicionamiento del cierre que rodea el campo de la feria. El profesor de este módulo informó de que también están listas las escaleras que dan acceso al recinto desde la Rúa da Mercede, aunque para terminar esta obra están pendientes de que el Ayuntamiento firme la compra de un alpendre colindante a otro ya rehabilitado y así acondicionarlo y que el pavimento vaya todo al mismo nivel.
Por su parte, el taller con la especialidad de fábricas de albañilería y pavimentos está cerca de rematar la restauración del cierre del cementerio municipal, con el proyecto avanzado "aproximadamente al 50%", como aseguró el monitor. Entre los trabajos restantes queda la colocación del camino de pizarra de 1,75 metros de ancho que irá hasta el final del cementerio. "Fue más rápido de lo que pensaba", dijo el coordinador valorando a los alumnos de manera satisfactoria "por su buen hacer". Además, comentó que fue de los "mejores grupos" que ha tenido en este tipo de módulos y que personal de varias empresas le llegaron a preguntar por la situación de los mismos, lo que refleja "que no solo lo dice el profesor".
La principal queja de ambos profesores es el paso de peregrinos sin medidas de prevención, como el uso de mascarillas, por lo que piden que se actúe con responsabilidad. Para evitar este tipo de situaciones, colocaron cintas para mantener la separación entre viandantes y alumnos. Sin embargo, esta medida no fue del todo efectiva por lo que colocaron un cartel informativo donde se puede leer 'zona de tránsito masivo, uso obligatorio de mascarilla'.
La principal consecuencia que tuvo el Covid-19 para los estudiantes fue la privación de la parte práctica durante 107 días. Uno de los maestros resaltó que puede "explicar cómo se usa una radial, pero si el alumno no lo realiza por su cuenta, es muy diferente". Con la vuelta al trabajo, llegaron nuevas medidas de prevención. Desinfección del material por la mañana y antes de comer con las pautas marcadas por la Xunta, uso en todo momento de mascarillas, cambio en la localización del material para garantizar la distancia recomendada con los viandantes o separación entre los estudiantes son algunas de ellas. Sin embargo, debido al calor propio del estío, unido a las altas temperaturas que azotan a toda la comunidad, se producen situaciones que dificultan el trabajo. Por ello, uno de los profesores explicó que tienen que hacer "alguna parada de más" para hidratarse. Todo ello para que el Camino brille a su paso por Sarria.
