El punto negro de Agreimonde

Un turismo derriba el cierre de una vivienda de este núcleo del municipio de O Páramo. Es una curva en la que varios coches se salieron de la vía causando daños en propiedades
Un turismo se llevó parte del muro de cierre de esta vivienda de Agreimonde. PORTO
photo_camera Un turismo se llevó parte del muro de cierre de esta vivienda de Agreimonde. PORTO

Un turismo se salió este martes de la vía y derribó el cierre de una vivienda en el núcleo de Agreimonde, en la parroquia paramesa de Vilafiz. Este fue el último accidente ocurrido en este lugar, un "punto negro" según los vecinos, que denuncian que son recurrentes las salidas de vía, sin heridos, en esta zona con curvas de la carretera de A Pobra de San Xiao a O Páramo (LU-P-4304). Algunos coches llegaron a colisionar con muros y construcciones o acabaron en una finca.

El siniestro de este martes ocurrió sobre las ocho de la mañana, cuando un vehículo que circulaba en dirección a A Pobra se salió de la vía y se llevó por delante parte del cierre de la casa número dos de Agreimonde, que está deshabitada. Además, a causa del fuerte impacto, rompió la tubería de la traída de agua del inmueble.

Coche que impactó contra un gallinero hace unos meses. EP
Coche que impactó contra un gallinero hace unos meses. EP

En la curva hay otras dos viviendas que sí están habitadas y uno de los vecinos salió rápidamente alertado por el golpe. A pesar de la aparatosidad del choque, el conductor no sufrió heridas.

No es la primera vez que un coche colisiona contra esta misma casa, pues, según relatan los residentes, hace un tiempo otro vehículo también dañó el cierre.

"Todos os anos vanse unha media de cinco ou seis coches, sobre todo cando chove", afirma José Manuel Núñez, quien achaca la siniestralidad a la reforma de la curva que se hizo hace aproximadamente dos décadas.

La situación se vio agravada en otoño, durante las semanas en las que estuvo cerrado un tramo del corredor por las obras para la apertura de la autovía y los vehículos fueron desviados por la carretera LU-P-4304. Entonces se produjeron varias salidas de vía, algunos coches "pegaron contra o lado do monte", enfrente de las casas. En otras incidencias "non chegaron a impactar, levaron derrapes e sustos", asegura.

En aquel momento, a mediados de octubre, uno de los turismos acabó chocando contra el gallinero de la vivienda de su familia, situada en el número 3, y dañando el muro. Afortunadamente un cierre de arbustos pudo ayudar a amortiguar el golpe.

Según apunta, una o dos semanas después un coche se fue contra el inmueble número 1 de este núcleo. "Era finais do mes de outubro. O turismo deu contra a casa, pero non lle fixo nada, só unha rabuñada. Deitou tamén unha maceira", explica el propietario de esta vivienda, quien asegura que la curva es "perigosa, hai moitos accidentes".

El paramés recuerda al menos otros dos siniestros en los que los automóviles acabaron en su propiedad. Hace tiempo "un home saíra voando e quedara na finca coas rodas para arriba e outro coche, con dúas rapazas, acabou de fuciños e tirou unha árbore".

En la carretera, de titularidad provincial, hay un quitamiedos, que finaliza en las inmediaciones de la casa número 1, y algunos vehículos también terminaron colisionando con él. La protección se encuentra sin arreglar, se quejan, al igual que las señales que tiraron coches al salirse de la vía. Uno de los vecinos asegura que él mismo se encargó de levantar los indicadores, colocando piedras y un palo de madera para sujetarlos.

El alcalde paramés, José Luis López, apunta que en la curva se produjeron "moitos" siniestros, especialmente al estar cortado el corredor, cuando ocurrieron "catro ou cinco accidentes xuntos". En ese momento, explica, se puso en contacto con la Guardia Civil y acudió Tráfico, que "quedaron de estudar" la situación.

Los residentes reclaman que se tomen medidas para evitar nuevas salidas de vía y que un día se pueda producir un accidente grave.