Un empresario de 64 años fue la persona que resultó herida en la mañana de este domingo al derrumbarse un talud en el barrio de O Mazadoiro, en Sarria, que le provocó un golpe en la cabeza y en una pierna. El impresionante desprendimiento provocó, además, daños en vehículos.
El suceso ocurrió a las 11.30 horas en un terreno en el que se ubican unas naves donde tienen sus instalaciones una firma de transportes de mercancías y la empresa del servicio de limpieza y recogida de basura. Poco antes, sobre las 9.00 horas, se había producido un pequeño derrumbe. Este no dejaba salir un camión, por lo que el responsable de la empresa de transportes, junto a otras dos personas, se disponía a retirar la tierra para poder sacarlo.
Entonces tuvo lugar un nuevo desprendimiento en el talud, de unos doce metros, aunque en esta ocasión llevándose por delante un muro de contención, toneladas de tierra, piedras y árboles. "O primeiro derrubamento foi unha pouca terra nunha esquina e despois parecía a guerra", explicó la propietaria de las naves.
Una persona, que estaba trabajando con una pala para retirar la tierra, explicó que al derrumbarse el talud escapó rápidamente, aunque el desprendimiento golpeó su vehículo, dañando una rueda. "Coincidiu que ía marcha atrás e escapei", contó este trabajador. El propietario de la empresa de transportes y otra persona también huyeron, aunque el derrumbe alcanzó al primero. "Levouno sentado de arrastro", afirmó.
La masa de tierra no llegó a sepultar al sexagenario, quien sufrió el golpe. Al pasar más de media hora y no llegar la ambulancia, el hombre fue trasladado en el maletero de un coche al PAC.
Las toneladas de tierra llegaron a desplazar dos semirremolques y tiraron también parte del muro de cierre de los terrenos, ubicados junto a la LU-546. Una furgoneta, además, sufrió daños.
El desprendimiento pudo producirse por un embolsamiento de agua en una finca, filtrándose por debajo de un muro de contención y llevándose todo por delante. Por la carretera de Goián, situada en las inmediaciones, también corría una gran cantidad, llegando hasta la carretera LU-546. Ante ello investigarán de dónde procedía el agua para evitar que se puedan producir nuevos incidentes.
Hasta el lugar del accidente se desplazaron agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, el alcalde, Claudio Garrido, y los concejales Pedro López y Félix Seijas.
"Como un terremoto"
En el lugar también se encontraba el responsable de la empresa de limpieza y basura en Sarria. Según contó, el primer derrumbe fue como "un ruído dun terremoto". Acababa de entrar en las instalaciones cuando se produjo el segundo desprendimiento. "Sentín o ruído e xa vin que o home era arrastrado", afirmó.
