Mercadona ha elegido la tienda de Sarria para poner en marcha en la provincia de Lugo su estrategia 6.25 para la reducción de plásticos y residuos. El supermercado sarriano es uno de los cuatro de Galicia en los que se implanta este modelo para fomentar el reciclaje en sus instalaciones y, al mismo tiempo, ayudar al cliente en el cuidado del planeta.
La tienda piloto comenzó a funcionar este jueves junto con la de Ourense, mientras que el día 21 lo harán las de A Coruña y Cambados. Para ello hubo que sustituir cartelería, instalar contenedores para el reciclaje y formar a la treintena de trabajadores del supermercado, que fue seleccionado por disponer de la sección "Listo para comer" y estar incluido en el modelo eficiente, lo que motivó una serie de reformas hace un año.
Los clientes de esta primera jornada recibieron como obsequio un imán para la nevera en el que se informa de cómo separar y dónde depositar cada residuo. Además, se encontraron en el supermercado con una serie de contenedores y papeleras para el reciclaje, entre los cuales llamó especialmente la atención el de cápsulas de café, según comenta la coordinadora de planta, Nery González.
Otro de los distintivos del modelo de tienda 6.25 es la eliminación de las bolsas de plástico de un solo uso en todas las secciones. De este modo, en pescadería, charcutería, frutería y horno se emplean bolsas compostables o reutilizables. También se retiran desechables de plástico de un solo uso y se incorporan pictogramas para ayudar a los clientes a depositar los restos en los contenedores adecuados.
Contenedores para las cápsulas de café y bolsas compostables son algunas medidas
La cartelería que fue instalada informa al consumidor sobre aquellos productos que contienen material sostenible, como la nueva botella de zumo de naranja exprimido, fabricada en su totalidad con plástico reciclado, según señalan desde la compañía.
A modo de ejemplo, citan también la sustitución del stick de plástico por papel en los bastoncillos de algodón. Tampoco hay plástico ya envolviendo el enjuague bucal ni en el menaje, mientras que las cápsulas de café se presentan en envases de cartón.
El objetivo final de estas y otras acciones es la disminución del uso del plástico en un 25% de aquí al año 2025. En ese horizonte se proponen también que todos sus envases de plástico sean reciclables y reutilizar todo el residuo de este tipo que generen.
