La primera marcha a favor de una vía verde en A Pobra de San Xiao se celebró este jueves, convocada por el Ayuntamiento de Láncara y con la participación de varias decenas de vecinos, que quisieron así reivindicar el aprovechamiento de las antiguas vías del tren para crear una senda que "cambiará por completo a imaxe do noso concello", señalaron.
Los participantes salieron a las ocho y media de la tarde desde el paso a nivel de Agreimonde y realizaron un recorrido a pie por las vías del tren, que dejaron de prestar servicio hace solo unos días con la entrada en funcionamiento de la variante de A Pobra.
Una pancarta en la que podía leerse "Marcha por unha vía verde na Pobra de San Xiao" encabezaba la comitiva, integrada por vecinos de distintas edades y familiares de víctimas de accidentes ferroviarios, además del alcalde (el socialista Darío Piñeiro), ediles de su gobierno y el concejal del BNG.
A la altura de la antigua estación hicieron un alto para dar lectura a un manifiesto en la voz de una vecina del municipio y familiar de una de las personas fallecidas en las vías. "Hoxe queremos iniciar unha nova etapa. Queremos entre todos escribir o futuro da nosa vila. Esta primera marcha por unha vía verde supón non só reivindicar algo que nos corresponde, senón tamén poñer en valor algo que tanto representou para nós. Estamos, sen dúbida, ante o proxecto máis relevante dos próximos 50 anos e que cambiará por completo a imaxe do noso concello", recogía el manifiesto.
Con este escrito, mostraron su apoyo a la creación de una senda verde "que preserve o noso patrimonio, tanto cultural como natural e industrial, posto que este tipo de vías son un atractivo turístico, ademais dun importante mecanismo para fomentar un hábito de vida saudable entre os nosos veciños de veciñas", destacaron.
Los participantes en esta marcha indicaron que Adif tiene intención de ceder "con carácter inmediato" la titularidad de estos terrenos a favor del Ayuntamiento, ante lo cual pidieron que esa cesión llegue acompañada "dunha importante partida económica, posto que abordar un proxecto destas características para un concello de apenas 2.600 habitantes sería unha hipoteca". De igual modo, solicitaron que el proyecto de senda verde respete el diseño que elaboran alumnos de la Universidade de Santiago dentro de un convenio con el Concello.
