Hospitaleros sin Fronteras celebra su mercadillo en O Incio con buena acogida

Los fondos se destinan a los niños talibés de Senegal, país al que 16 personas viajarán en breve para llevar material escolar o medicamentos
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photo_camera Público en el mercadillo de Hospitaleros sin Fronteras. EP

La ONG sarriana Hospitaleros sin Fronteras celebró este sábado en O Incio un mercadillo solidario, el cual tuvo una muy buena acogida de público, tal y como destaca la entidad.

El rastrillo fue organizado, en las instalaciones del mercado ganadero, junto a la asociación As Xeitosas y con la colaboración del Concello. En él hubo desde juguetes hasta bisutería, ropa o libros. Se trata de artículos que fueron donados a la ONG pero que "no es factible" llevar a Senegal, país en el que ayudan a los niños talibés que viven en daaras (escuelas coránicas) y piden limosna en la calle.

Según explican desde Hospitaleros sin Fronteras, los productos se pusieron a la venta "por donativo". Este mercadillo fue una de las primeras actividades organizadas por la ONG en la comarca para recaudar fondos. Anteriormente celebró dos exposiciones de fotografías con las que mostrar su trabajo.

Todo el dinero reunido con el mercadillo se destinará al país africano, al que viajarán "en breve", según indican desde la entidad. Hasta allí se desplazarán un total de 16 personas, la mitad de ellas de Sarria. Se encargarán de llevar diversos artículos, como medicamentos, material escolar y ropa para ayudar a los menores.

La entidad recupera así los viajes solidarios al país africano después de que en 2021 no pudiera llevarse a cabo a causa de la pandemia del coronavirus. Estos se organizan habitualmente a principios de año y participa un grupo de voluntarios de diversos puntos de España.

Hospitaleros sin Fronteras se registró oficialmente como ONG en 2016 para ayudar a los talibés, menores que proceden de zonas rurales de Senegal y de otros países pobres o en conflictos y fueron entregados por sus padres a las daaras, las cuales son regidas por marabús o maestros que los obligan a pedir limosnas en la calle.

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