La perrera instalada por el Concello de Sarria en el barrio de San Lázaro en el año 2016, la cual había generado múltiples quejas vecinales, fue desalojada este domingo con el traslado de los nueve perros que quedaban en las instalaciones a una residencia de Santiago.
La asociación Huellas de Sarria, que atendió en total a 302 animales en estos casi tres años, difundió este domingo un comunicado en redes sociales en el cual explica que el desalojo de los nueve perros se produce "por decisión de las autoridades locales". Según indica, permanecerán en la residencia canina hasta que puedan ser llevados al nuevo refugio que proyecta la asociación o bien encuentren casas de acogida o de adopción.
Huellas de Sarria señala también que seguirá haciéndose cargo de estos nueve animales y de los otros 31 perros y gatos que gestionó hasta el momento y que no encontraron un hogar definitivo, sobre los cuales siente "una responsabilidad moral". "Más que nunca necesitamos casas de adopción o acogida para estos últimos", afirma el colectivo.
Ninguna voluntaria de Huellas acudirá a las instalaciones del taller de empleo de la la Rúa do Porvir, donde estaba la polémica perrera
SERVICIO EXTERNO. A partir de ahora, aclara, ninguna voluntaria de Huellas acudirá a las instalaciones del taller de empleo de la la Rúa do Porvir, donde estaba la polémica perrera, "ni se hará cargo de los nuevos perros que aparezcan perdidos o abandonados en el municipio, pues el Ayuntamiento de Sarria nos ha trasladado su intención de contratar un servicio externo que se encargue de tal tarea", especifica.
El gobierno indica que tiene contactos con una protectora de la zona de A Coruña para que se haga cargo de los animales que aparezcan abandonados a partir de ahora en Sarria mientras no se construya el refugio de Huellas o el de Monforte proyectado por la Diputación. La alcaldesa, Pilar López, sostiene que la asociación sarriana tiene ya el proyecto del refugio y el terreno para construirlo y avanza que el Concello intentará colaborar con una subvención para apoyar la iniciativa.
Por su parte, la asociación asegura que seguirá luchando por los últimos 40 animales y que denunciará la aparición de perros y gatos perdidos o abandonados en el Ayuntamiento de Sarria.
"Prepararemos el nuevo refugio, que será un lugar seguro y estable para los animales que no han tenido suerte en su vida". Por ello, el colectivo hace un llamamiento a colaboradores y voluntarios. "Seguiremos necesitando toda la ayuda posible". "Huellas de Sarria no desaparece, el verdadero reto empieza ahora", concluye.
