El polémico edificio de siete alturas de la Rúa Calexa de Sarria, para muchos el "Garañón" local, desaparecerá por completo en cuestión de días. Tras más de cinco meses de trabajo, la empresa lucense encargada del derribo, Excavaciones J. Carreira, calcula que finalizará la actuación la próxima semana, lo que pondrá fin a 15 años de feísmo e impacto visual en el Camino de Santiago.
Ya solo quedan por demoler dos plantas, lo que ha permitido recuperar la vista en la zona. La máquina con un brazo de 30 metros de altura, necesaria para actuar en los pisos más altos, ha sido sustituida por otras de menores dimensiones y los trabajos avanzan ahora a un ritmo mayor tras la complicación que supuso en su día la retirada de los ladrillos que estaban por fuera de la estructura en la parte posterior del edificio, explicó la empresa.
En estos momentos, al tiempo que se realiza el derribo se tritura in situ, en un terreno aledaño, el material resultante, que después será utilizado como zahorra en pistas municipales.
La demolición de A Calexa, con un coste de unos 280.000 euros, mantiene cortada esta calle desde abril. Fue un mes antes cuando el Ayuntamiento concedió licencia a Inversiones Canvives para demoler este bloque, que se había sido concebido para 48 viviendas pero que nunca llegó a acabarse, sino que quedó ejecutado solo al 35%.
La licencia de obra databa de 2006 y el Concello declaró su caducidad en 2019. En esa misma situación se encuentra otro edificio en la misma calle para el cual el gobierno local pretende iniciar el mismo procedimiento de ejecución de la caducidad.
Ambos bloques motivaron sendas multas de 60.000 euros a la administración local, impuestas por la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta de Galicia tras la denuncia de un peregrino por su afectación al Camino de Santiago debido a su volumen. También ambos fueron subastados, pero sin encontrarles comprador.
El edificio que ahora está siendo derribado permitirá poder habitar otro inmueble de 20 viviendas, el cual lleva años acabado pero nunca antes pudo obtener la licencia de primera ocupación al estar incluido en el mismo proyecto que el de la Rúa Calexa.