La comisión de protocolo de Sarria, en la que están representados los distintos partidos, aprobó el lunes que la Rúa Calvo Sotelo pase a llamarse Rúa da Liberdade. El acuerdo, que deberá ser ratificado por el pleno, fue adoptado con los votos del equipo de gobierno y los grupos de PSOE y BNG, mientras que el PP se opuso al ser contrario al cambio de denominación de la principal calle de la villa en habitantes y negocios.
La concejala de cultura, Reyes Abella, llevó a la comisión la propuesta de Rúa da Liberdade, avalada por Camiña Sarria y Galicia Sempre. Defendió que se trata de un nombre que ya existió en el callejero de Sarria y que alude a un valor que no es cuestionable.
El nacionalista Efrén Castro apoyó esta iniciativa. El BNG, que lleva años planteando el cambio de Calvo Sotelo y José Antonio dentro "do espírito de reposición da memoria histórica", ya había barajado la opción de Rúa da Liberdade en el anterior mandato.
El PSOE votó también en el mismo sentido para dejar clara su postura favorable a la retirada de José Calvo Sotelo del callejero. No obstante, este partido tenía otras preferencias para bautizar la vía. El edil Diego López propuso a la comisión Camiño de Santiago –dada la gran relevancia de la ruta jacobea en Sarria y la inexistencia de calles o plazas a ella dedicada– o bien Álvaro Cunqueiro.
Desde el gobierno reconocieron la importancia del Camino y se comprometieron a dedicarle algún espacio público en cuanto exista otra ocasión, afirmó Abella.
CONSULTA CIUDADANA. Los socialistas fueron críticos con la falta de participación ciudadana en este proceso. Según Diego López, la propuesta tendría mayor legitimidad si se implementase algún sistema para que los vecinos pudiesen votar entre tres nombres, hecho que fue descartado por el grupo de gobierno, dijo.
El PP, representado en la comisión por José Manuel Bello y Diana García, se posicionó en contra de sustituir el nombre porque, según expuso, no se ampara en la ley de la memoria histórica, sino que responde a "una cuestión política e ideolóxica" del gobierno, al que acusó de actuar de forma "antidemocrática" por no buscar el consenso. Argumentó que este modo de proceder podría acarrear nuevos nombres cada cuatro años según los mandatarios de turno.
Los populares denunciaron también "falta de información" a la ciudadanía. Reclamaron reuniones con vecinos y representantes de los distintos establecimientos de la calle, una solicitud que no fue tenida en cuenta, por lo que "o atropelo aínda é maior".
El partido sostuvo, además, que se ocasionarán una serie de gastos a los comercios y otros negocios por el cambio de papelería, carteles o página web. "Nin é un asunto urxente nin é o momento", opinó el partido, en alusión a los perjuicios que causó la pandemia y ante los cuales "o goberno non habilitou ningunha axuda".
La denominación de Rúa da Liberdade posiblemente sea llevada ya al pleno del día 28 y contará con los apoyos suficientes a tenor de la votación de ayer. Será el segundo cambio en el callejero de Sarria en lo que va de año después de que José Antonio pasase a llamarse hace unos meses Xela Arias.
CALLEJÓN DE BARREIROS. La comisión de protocolo también acordó, en este caso por unanimidad, oficializar la denominación del callejón de Barreiros, como es conocida una pequeña vía que parte de Calvo Sotelo. El nombre será en gallego, para lo cual el Concello consultará a un lingüista.
