Los tres ciudadanos colombianos que fueron liberados por la Policía Nacional de una granja de más de mil cerdos en Sarria, donde vivían en unas condiciones infrahumanas, confían en legalizar su situación en España antes de que finalicen los tres meses de plazo.
Hace dos meses fueron liberados después de que uno de estos ciudadanos colombianos, captados en su país bajo engaño, según los investigadores, denunciara en comisaría la "pesadilla" que estaban sufriendo él, un hijastro y otro hombre de esa misma nacionalidad.
Fue Jhon Henry Hincapié el que puso de manifiesto esta situación, lo que llevó a la detención de la dueña de esa explotación porcina por un supuesto delito de explotación laboral y de trata de seres humanos.
El abogado de éste y de su hijastro, Ángel Vellé, ha confirmado que los tres "se encuentran en un periodo de protección por ser posibles víctimas de trata de ser humanos".
Esta situación remata "a finales del mes próximo (junio)", ha puntualizado, pero espera que "durante este tiempo obtengan su permiso de residencia y puedan estar en una situación legal en España".
TESTIGOS. Es el juzgado de Sarria el que lleva la instrucción, donde ya "se han producido las declaraciones" tanto de los clientes de Vellé como del "otro trabajador", todos ellos en situación irregular en el país.
También "en su momento fue detenida la propietaria de la granja y prestó declaración". Ahora, ha asegurado el abogado, "el procedimiento se encuentra en fase de investigación". "Lo próximo que ocurrirá será la declaración de testigos, que suponemos que próximamente nos citarán para esas declaraciones", ha concluido.
