l.p.La junta de gobierno de Sarria aprobó este miércoles la rescisión definitiva del contrato de finalización de las obras de Ponte Ribeira de Sarria.
El Ayuntamiento ya había dado luz verde al inicio de la resolución el pasado julio, tras lo que la empresa adjudicataria no presentó alegaciones. Por ello, se aprobó rescindir definitivamente el contrato y el Concello tendrá que indemnizar a la firma con el 3% del coste del proyecto, es decir, 9.720,86 euros, según informó el alcalde, Claudio Garrido.
Los trabajos fueron adjudicados hace un año a la empresa Ovisa Pavimentos y Obras por 392.074 euros (incluido el Iva) y un plazo de ejecución de 75 días. Sin embargo, el nuevo gobierno tomó la decisión de resolver el contrato ante la propuesta de modificación del proyecto de la dirección de obra, la cual conllevaría un aumento del importe de los trabajos en 161.199 euros. El coste del modificado supera el 20% de la cuantía en la que se adjudicó (es del 41,11%), de ahí que el Concello considera que, por ley, es preciso rescindir el contrato. Además, un informe de secretaría de hace meses ya indicaba que se debía resolver.
Ponte Ribeira vive así un nuevo percance en sus obras, pues el viaducto se encuentra cerrado desde hace ya cinco años. El planteamiento del Ayuntamiento es instalar una plataforma para una apertura provisional. Además, en una junta de gobierno en julio acordó solicitar a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS), como organismo competente, la redacción, previo estudio arqueológico completo, de sendos proyectos para la reconstrucción, rehabilitación y puesta en valor de la antigua Ponte Ribeira, tal y como originariamente fue concebida, como paso a pie de peregrinos, y para la construcción, aguas arriba, de un nuevo puente para solucionar el paso rodado.
El Concello aceptó la cesión, de forma gratuita, de una pequeña propiedad en la Rúa José Antonio, junto la capilla de San Lázaro
CEMENTERIO. Entre los puntos del orden del día también figuraba la rescisión del contrato a la empresa adjudicataria de la ampliación del cementerio municipal, si bien no fue tratado este asunto en la sesión al encontrarse pendiente de un informe de intervención. Las obras de la necrópolis están paradas desde octubre del pasado año por problemas en el proyecto.
Por otro lado, la junta de gobierno dio cuenta de sendos escritos de la Valedora do Pobo. Uno de ellos deriva de la queja de un vecino por los ruidos y humos de un establecimiento hostelero de la zona de vinos de Sarria, el cual ya fue advertido por la Policía Local, indicó el regidor.
El segundo escrito de la Valedora hace referencia a una queja de una vecina de Céltigos por la falta de abastecimiento de agua en este núcleo, lo que ya provocó múltiples denuncias de los residentes en el pasado. El Concello explicó que está tramitando un proyecto para dotar de la traída a Céltigos, así como a Lousadela, A Veiga, Manán y O Mato. Estos núcleos también reclamaron el servicio en numerosas ocasiones.
Por otro lado, el Concello aceptó la cesión, de forma gratuita, de una pequeña propiedad en la Rúa José Antonio, junto la capilla de San Lázaro.
El Ayuntamiento concedió, además, licencia a Nedgia Galicia -distribuidora de gas natural de Naturgy- para la ampliación de la red de canalizaciones para dar servicio a inmuebles de las calles Formigueiros y Calvo Sotelo. También aprobó una autorización a Unión Fenosa para instalar una línea con la que dar suministro eléctrico a una vivienda unifamiliar de Meixente. Otorgó otras licencias de obra y actividad para una cafetería, explotaciones de ganado porcino y vacuno, y legalización de un almacén de maquinaria agrícola, entre otros.
