La Xunta ha condenado este martes, en una concentración celebrada ante el complejo administrativo de San Caetano y en la que se ha guardado un minuto de silencio, el último caso de violencia de género registrado en Galicia, concretamente en Vigo, el tercero en la Comunidad en lo que va de año.
Altos cargos del Gobierno gallego, como el jefe del Ejecutivo, Alberto Nuñez Feijóo; el vicepresidente, Alfonso Rueda; la conselleira de Sanidad, Rocío Mosquera, y la titular de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, entre otros, han censurado esta tragedia.
Tras el minuto de silencio, la secretaria general de Igualdad, Susana López Abella, ha trasladado las condolencias del Ejecutivo gallego a la familia de la víctima, una mujer brasileña de 46 años, y a la ciudad de Vigo, donde ésta residía.
Abella ha hecho una llamada de atención a la ciudadanía gallega para pedir la más absoluta "repulsa" ante un acto "tan tremendo que conmociona a toda la sociedad". Asimismo, ha reiterado que el Gobierno gallego ha puesto a disposición del hijo de la fallecida el dispositivo de "ayuda de emergencia", ya que el joven, de 21 años, se queda en una situación "un poco complicada".
La Xunta también se ha puesto en contacto con este muchacho, que no era hijo del presunto asesino y pareja de la víctima, un hombre de 31 años y nacionalidad española; para pedir "autorización" para que la Administración autonómica se persone como acusación particular en el caso. Abella también ha avanzado que si los servicios municipales no pudiesen hacerse cargo de la repatriación del cadáver, lo haría la Xunta de Galicia.
