La Xunta regenera el viejo vertedero de Chantada tras tres años de actuaciones

Las obras sirvieron para recuperar una de las zonas más degradadas del municipio, que estaba cubierta de escombros de la construcción

Visita de Balseiro al vertedero, acompañado por el alcalde y otros miembros de la corporación. TOÑO PARGA
photo_camera Visita de Balseiro al vertedero, acompañado por el alcalde y otros miembros de la corporación. TOÑO PARGA

El viejo vertedero de residuos de la construcción de Chantada quedó completamente sellado y clausurado tras tres años de actuaciones. La medida implica que el espacio, ubicado en la parroquia de San Xurxo de Centulle, cuenta con una cubierta vegetal natural cuando antes estaba ocupado por distintos residuos.

El delegado de la Xunta en Lugo, José Manuel Balseiro, y el alcalde de Chantada, Manuel Lorenzo Varela, visitaron este martes la zona. En los últimos tres años se procedió, en distintas fases, a retirar todos los residuos voluminosos del vertedero, tratarlos de manera adecuada y estabilizar la superficie libre. Además, se impermeabilizó y se controlaron las aguas superficiales y se restauró la vegetación.

Los trabajos se financiaron desde la Xunta de Galicia a través de distintas aportaciones del Fondo de Compensación Ambiental. Esta línea de ayudas está financiada mediante el canon que el Gobierno gallego cobra a las empresas eólicas y de distribución de energía. Tiene entre sus objetivos apoyar iniciativas que contribuyan a la protección y mejora del medio ambiente.

Balseiro también aprovechó su visita a la zona para conocer el resultado del taller de empleo impulsado por la Xunta y que se desarrolló en Chantada y Carballedo desde el pasado mes de septiembre.

LAS OBRAS. Las actuaciones en Carballedo se centraron en el viejo ambulatorio y el entorno del campo de fútbol de A Barrela. En Chantada se trabajó en el mercado ganadero y en varias zonas verdes. La inversión total ascendió a 280.000 euros.

En el caso del antiguo ambulatorio de Carballedo el objetivo es convertir las instalaciones del centro de salud en una casa de la cultura y los alumnos del taller de empleo hicieron las primeras actuaciones en ese sentido a través del módulo de albañilería.

El taller acogió a una veintena de alumnos. De esa cifra, 15 se formaron en operaciones de hormigón y fábricas de albañilería, ocho de ellos lo hicieron en Carballedo y otros siete en Chantada. Los cinco restantes trabajaron en el ámbito de la jardinería y la conservación de montes y viveros.

Los alumnos de jardinería desarrollaron su labor en Chantada en el recinto de las piscinas, en el campo de fúbol de O Sangoñedo, en el parque del antiguo campo de la feria y en diversas calles del municipio, como la Avenida de Monforte, la Praza de Galicia y el vivero municipal.

También se realizaron labores de conservación en el monte de As San Lucas y en otras zonas del rural del municipio como en los codos de Belesar.

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