Los visitantes del geoparque Montañas do Courel ya conocen y emplean la aplicación Museos Vivos, que les permite acceder a cualquier hora del día a tres centros de interpretación de la comarca. La acogida ha sido positiva porque "se hai algo desa-gradable á hora de facer turismo, iso é atopar un museo pechado", reflexiona Roberto Castro, teniente de alcalde de Ribas de Sil.
En este municipio, sus dos museos tienen instalada esta tecnología, que está impulsada por varios grupos de desarrollo rural y que esta semana fue presentada de forma oficial, si bien en el geoparque funciona desde hace algunos meses.
Desde entonces aumentó considerablemente el número de usuarios. Como ejemplo, Roberto Castro explica que el nuevo Centro de Interpretación do Río Sil (CIRS) de Torbeo, que no tiene un horario fijo y al que los turistas solo acceden mediante la aplicación, ya supera en visitas al Centro de Interpretación de la Minería Aurífera Romana (Cimar) de San Clodio, que abre todos los sábados y domingos de 12.00 a 14.00 horas, y que también está en la red de Museos Vivos.
Roberto Castro puntualiza que esta plataforma "non substitúe, senón que complementa". Para municipios pequeños como Ribas de Sil (937 habitantes) no es posible contar con personal para mantener abiertos sus dos museos todos los días y esta solución "é mellor que telos pechados". Castro añade que desde el Ayuntamiento realizan visitas guiadas para grupos si existe reserva previa.
Además de los dos citados, Museos Vivos también permite acceder al Centro de Interpretación das Covas de Meiraos, situado en O Courel. Los dos museos de Quiroga, el etnográfico y el geológico, sí cuentan con personal, pero su horario de apertura se reduce a una hora al día.
En el resto de Galicia, la aplicación está disponible para visitar una basílica en Allariz y un aula de la naturaleza en el municipio coruñés de Mesía.
Funcionamiento. Museos Vivos permite a los centros que incorporan esta tecnología estar plenamente operativos y abiertos las 24 horas del día. Para acceder, los visitantes deben registrarse en la web, indicando el día y hora que hayan previsto para su visita.
Una vez realizado ese paso, se les facilita un código que luego deberán marcar en un teclado junto a la puerta del edificio. En el interior, la iluminación se enciende de forma automática, así como las cámaras de videovigilancia.
