El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, ha confirmado este viernes que la situación del infectado por tuberculosis en O Saviñao está "totalmente controlada".
Almuiña ha recordado que cuando se detecta un caso como este se hace siempre una investigación del centro donde ocurrió y del entorno del paciente. "Se trata de un sistema de vigilancia muy ágil", ha subrayado Vázquez Almuiña, quien recordó que es una enfermedad que tuvo un importante peso en Galicia pero que está prácticamente erradicada.
En total, media docena de niños del ciclo de educación infantil (de entre tres y cinco años) del colegio público Doutor López Suárez de Escairón, en O Saviñao, dieron positivo en el test Mantoux que les fue realizado en el centro de salud de la localidad para detectar un posible contagio de tuberculosis. De esa cifra, cinco de los menores habrían desarrollado la enfermedad y un sexto estaría en vigilancia para ver si se ve afectado.
Según comunicó el Sergas, es la Unidad de Tuberculosis (UTB) del Hospital Universitario Lucus Augusti (Hula) la que coordina todo el protocolo marcado por el programa de prevención de esta enfermedad y la que está en contacto con los afectados para indicarles las medidas a tomar.
Las fuentes consultadas explicaron que los controles se están extendiendo a los núcleos familiares de los niños que desarrollaron la enfermedad.
La unidad específica del Hula está controlando el protocolo que ahora se desarrolla en el hospital de Monforte
En el caso de los menores, desde el servicio de Pediatría y tras completar el test Mantoux con otras pruebas, entre ellas una placa, ya se les pautó un tratamiento. Por lo que respecta a los adultos, y según los testimonios recabados entre los afectados, la gran mayoría están a la espera de que les den indiquen las medidas a tomar.
Los pacientes exigen comenzar con los tratamientos pertinentes cuanto antes porque temen que puedan seguir contagiando a sus allegados o que la situación empeore.
EL ORIGEN. La alarma por el brote de O Saviñao saltó el pasado mes de diciembre cuando se confirmó un caso de tuberculosis pulmonar en un adulto vecino de O Saviñao.
Se comprobó que desde el entorno familiar de esa persona se podría haber producido un contagio con los alumnos de infantil del colegio público por lo que se activaron los protocolos para hacerles las pruebas a los niños. En un primer momento estaba previsto desarrollar los procedimientos en enero, pero la alarma generada entre los padres aceleró los plazos y se hicieron el pasado 26 de diciembre, llegando los primeros resultados el día 28.
A partir de los primeros positivos, los familiares de los afectados se desplazaron al hospital comarcal para controlar nuevos contagios.
La situación generó gran preocupación en la comunidad escolar pero también en el resto del municipio, que está pendiente de saber el alcance del brote.
En declaraciones a EFE, Armesto confirmó que este brote se produjo a raíz del contagio de un "adulto", que no informó sobre el hecho de que se había infectado de tuberculosis y acabó transmitiéndoles la enfermedad "a su propio hijo y a un sobrino".