Tecnología contra la basura

Los alumnos de tercero de Eso del López Suárez de O Saviñao presentaron en un concurso en Vigo un contenedor inteligente que avisa cuando está lleno y envía los datos por wifi a los barrenderos para decidir así por qué zonas realizar cada jornada la recogida.
Los alumnos que presentaron el Smart Trash Bin, en Vigo. EP
photo_camera Los alumnos que presentaron el Smart Trash Bin, en Vigo. EP

Corren tiempos de cambios e innovación, de utilizar la tecnología en favor del medio ambiente y de fomentar núcleos de población más limpios. Por ese camino han ido los estudiantes de tercero de Eso del Centro Público Integrado (CPI) Dr. López Suárez de O Saviñao para elaborar el proyecto que presentaron a las primeras olimpiadas de telecomunicaciones, celebradas en Vigo.

Los jóvenes idearon en clase un contenedor inteligente pensado para que las empresas encargadas del servicio de recogida de basura en un ayuntamiento sepan a distancia si está o no lleno para diseñar por dónde realizarán la ruta ese día. "Así no pierden el tiempo yendo a recoger uno que a lo mejor está vacío y acuden directamente a los que se encuentran llenos", explica el profesor coordinador del proyecto, Gabino González.

De esta manera, añade el docente, el contenedor cumple con el objetivo número once de la agenda 2030. "Es el que habla de ciudades inteligentes, sostenibles y resilientes", apunta.

Smart Trash Bin es el nombre del plan elaborado por David Rodríguez Pérez, Patricia López López, Candela Iglesias López, Martha Rodríguez Expósito y José Manuel Cidre López. Tuvieron que presentarlo en la Escola de Enxeñaría de Telecomunicacións viguesa, en un auditorio. "La actividad sirvió, además, para que los alumnos pierdan el miedo a hablar en público", destaca Gabino.

Cada martes y jueves por la tarde, los estudiantes se quedaban una hora —a veces incluso más— después de clase para trabajar en el proyecto Smart Trash Bin. El contenedor lo hicieron a escala, de madera y aprovechando una máquina cortadora láser que hay en el centro.

Una vez comprobaron que el contenedor funcionaba, llegó el momento de preparar la presentación. Era necesario explicar bien el sistema para asegurarse la mejor posición posible en el concurso.

¿Cómo funciona?

El método consiste en el envío de datos por wifi. Un programa detecta el nivel de llenado de los contenedores y lo manda a la empresa que se encarga de vaciarlos, que solo debe decidir por qué puntos se moverán ese día sus trabajadores para llevar a cabo el servicio, en función de si hay basura suficiente o no en los contenedores.

No es la única innovación que incorporan estos particulares recipientes. Una app permite, además, conocer quién los utiliza. Cuando un usuario llega para depositar sus residuos se conecta a él vía bluetooth y sus datos quedan registrados.

"La idea es averiguar qué gente utiliza en mayor número los contenedores o si lo hace correctamente. Así pueden premiarse los buenos hábitos u organizar concursos, por ejemplo", explica Gabino González, muy contento con el trabajo de sus alumnos.

No podía ser de otra forma. Smart Trash Bin también se ha sumado a la moda de la inteligencia artificial. En este caso, el invento beneficia a los usuarios. Siempre que tengan dificultades para distinguir en qué contenedor deben arrojar un determinado tipo de residuo, pueden sacarle una fotografía y la app les indicará cuál es depósito correcto.

Este trabajo tan complejo tuvo un resultado muy positivo en Vigo, donde se presentaron numerosos centros educativos procedentes de toda Galicia. Smart Trash Bin se hizo con la cuarta posición del concurso.

Puede parecer poco, pero no lo es. Gracias a este puesto, el colegio de O Saviñao estará representado en la fase nacional de las olimpiadas de telecomunicaciones. El centro conoció este martes la noticia y solo falta saber cuándo será la gran fecha. Será, eso sí, un concurso por videoconferencia.

Huertos urbanos en las azoteas

Son un total de nueve los alumnos y alumnas del colegio de O Saviñao que han trabajado en este tipo de actividad. Existía un segundo proyecto, consistente en aprovechar las azoteas de las ciudades como espacios para huertos urbanos. En él trabajaron Manuel Álvarez Ruiz, Sarai Rodríguez López, Daniela Rodríguez Pinto y Gael Miguel Losada.

La olimpiada de telecomunicaciones permitía la participación de un único proyecto. Además, Gabino González explicó que la iniciativa de los huertos en las azoteas "todavía no está terminada".

Monforte ► Nuevo sobresaliente para el Daviña Rey en el STEMbach
Nerea Quiroga Rodríguez, alumna del instituto monfortino Daviña Rey, recibió un sobresaliente por su proyecto de STEMbach, un bachillerato de excelencia. La investigación fue realizada a lo largo de dos años y lleva el título de Deseño centrado no usuario para a modelaxe e impresión 3D.
Nerea Quiroga. EP
Nerea Quiroga. EP

Nerea ideó una pieza que ayuda a la escritura de personas que presentan dificultades manuales por medio de la creación de los correspondientes objetos. Todos los prototipos y el diseño final se fabricaron mediante impresión 3D y un corte láser en el centro. 

El trabajo estuvo tutorizado por María Elena Arce Fariña, María Isabel Fernández Ibáñez y José Antonio López Vázquez, docentes de la Escola Politécnica de Enxeñería de Ferrol y el departamento de Enxeñería Industrial. 

La realización del diseño fue en colaboración directa con la Confederación Española de Asociacións de Atención a Persoas con Parálisis Cerebral (Aspace), quienes mostraron las problemáticas y necesidades de las personas que atienden. El coordinador de STEMbach del Daviña Rey, Pablo Blanco Quiroga, destacó el gran esfuerzo de Nerea en su proyecto.

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