El SAF de Chantada se echa a la calle para protestar por su externalización

Las trabajadoras manifestaron su oposición a unos servicios mínimos que ven "abusivos"
Un momento de la protesta por el SAF. EP
photo_camera Un momento de la protesta por el SAF. MIGUEL PIÑEIRO

La decisión del Ayuntamiento de Chantada de poner en manos de una empresa privada el Servizo de Axuda no Fogar (SAF) ha traído cola y el conflicto parece que va para largo. Ayer, las trabajadoras que componen la plantilla participaron en una manifestación en contra de la externalización y de unos servicios mínimos que ven "abusivos".

Convocadas por el sindicato CIG, las aproximadamente 30 empleadas del SAF se concentraron delante mismo de la casa consistorial. Desde allí emprendieron una marcha por el municipio para protestar por una situación que, dicen, merma sus derechos laborales y empeora la calidad a la hora de auxiliar a los usuarios.

A la propuesta aprobada en la última sesión plenaria por el gobierno en mayoría absoluta del PP la siguió un anuncio de huelga indefinida de las trabajadoras, hasta que la administración encabezada por Manuel Lorenzo Varela dé marcha atrás. El Ayuntamiento decretó unos servicios mínimos del 95%, lo que según fuentes consultadas por este diario impide a la práctica totalidad de la plantilla secundar el paro.

Para CIG, los servicios mínimos establecidos por el Ayuntamiento, de quien dependerá el servicio hasta el próximo 1 de enero, es un ataque al derecho a huelga de las trabajadoras, razón que precipitó la convocatoria de la protesta. Esta se llevó a cabo justo en la misma jornada, la de ayer, del comienzo del cese de la actividad.

Por el momento, el Ayuntamiento seguirá adelante con los trámites para que sea una empresa privada quien gestione el SAF. Eso sí, el alcalde anunció que ha solicitado a Traballo el envío de una persona que ejerza de mediadora entre el gobierno municipal y el comité de huelga.

ARGUMENTOS. Las personas en contra de la externalización del servicio indican que una administración ajena al Ayuntamiento "non ten en conta o tempo que lle leva a unha traballadora desprazarse a un domicilio, polo que o tempo de asistencia aos usuarios é menor". Por su parte, la oposición al PP (PSOE y Por Chantada) teme que la futura empresa encargada del SAF busque beneficio económico en el bolsillo de los vecinos.

El Ayuntamiento se apoya, principalmente, en las dificultades para contratar personal y sustituir a las trabajadoras cuando estén de vacaciones o de baja. Los populares recuerdan que una empresa privada puede sumar efectivos a una plantilla sin la necesidad de un proceso de selección.

El alcalde, Manuel Lorenzo Varela, insistió en que la convocatoria tuvo muy poca incidencia y aseguró que si el equipo de gobierno no estuviera seguro de que la reforma del servicio fuese positiva "non seguiría adiante".

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