Cafés históricos y con historia, esos establecimientos que disponen de un poso especial gracias al tiempo pero también a la forma en la que sus propietarios, además de haber sabido mantener su esencia original, han sido capaces de innovar para hacerlos dinámicos, vivos, en los que la actividad cultural, y por qué no, la gastronomía de vanguardia, está más que presente.
Ese fue el eje central de una investigación que a Fernando Franjo (Monforte, 1963), periodista e historiador, le ha llevado más de siete años de trabajo y que es el eje central para crear una ruta transnacional de cafés históricos como referencia cultural, económica y de turismo sostenible. Ello le ha valido para presentar una candidatura conjunta con la Asociación de Cafés com Historia de Portugal, presidida por el portugués Vitor Marques; al premio ECTN (European Cultural Tourist Network), uno de los galardones sobre destinos de turismo sostenible más importantes del continente europeo. El próximo día 22, en Rijeka (Croacia), se sabrá si la propuesta luso-galaica es la ganadora. La ruta sigue, como eje principal, el Camino Portugués a Santiago.
LAS CLAVES. Fernando Franjo explicó que la propuesta incluye "la consideración del café como referencia cultural unida a la incorporación de nuevos conceptos comerciales y nuevos modelos de negocio. Una combinación de patrimonio, valores culturales, gastronomía y servicio que los hace merecedores de convertirse en etapas de un itinerario a lo largo de toda la Península Ibérica".
Franjo mostró su satisfacción y orgullo porque esta propuesta haya conseguido llegar por el momento a ser una de las dos finalistas de este prestigioso premio continental.
Señaló que se trata de un viaje por el pasado, el presente y, por qué no, del futuro, de establecimientos emblemáticos localizados "en localidades que merece la pena conocer por todo lo que atesoran a nivel patrimonial".
UN LARGO VIAJE. El periodista e historiador monfortino recordó cómo surgió un proyecto que acabó materializado en el libro Cincuenta Cafés Históricos de España y Portugal, cuando en diferentes momentos a partir del año 2013 salió de viaje con su esposa, Anabel Calvo, a visitar poblaciones de la península de oeste a este, para luego llegar a Levante, Andalucía y luego regresar a Monforte subiendo por Portugal.
Fue un periplo que, destacó Fernando Franjo, "nos dejó encantados, tanto que de un blog todo acabó plasmado en una publicación y ahora en una candidatura a un premio de tanto prestigio como el European Cultural Tourist Network".
El monfortino indicó que "unas cosas llevan a otras" y que aunque no sea premiado el proyecto que ha dirigido tiene pensado ampliar la ruta turística y cultural tomando como referencia los cafés con historia de la Península.
