La Ribeira Sacra vive desde este este miércoles y hasta el sábado unas jornadas cruciales en su carrera a ser declarada Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco. El parador de Santo Estevo acoge un Consejo de Patrimonio Histórico en el que se estudiará la propuesta de este territorio y se decidirá si el Ministerio de Cultura la respalda y la eleva ante la Unesco con el objetivo de que la declaración llegue, en el escenario más optimista posible, en el segundo semestre de 2021.
En la tarde del miércoles comienzan a llegar a Nogueira de Ramuín técnicos y directores de las áreas de cultura y patrimonio de todas las comunidades autónomas y del propio Ministerio de Cultura, que forman parte del consejo.
Esos profesionales desarrollarán varias mesas de trabajo a puerta cerrada en las jornadas de mañana y el viernes en las que estudiarán la candidatura de Ribeira Sacra y una serie de cuestiones de nivel interno.
Además, harán algunas incursiones en el territorio y aunque la agenda se guarda con mucho celo para que los técnicos puedan trabajar en el ambiente más neutral posible, ha trascendido que la intención es visitar puntos como San Pedro de Rocas o los cañones del Sil y del Miño.
El sábado la mayor parte de los participantes en el congreso regresarán a sus lugares de origen y en Santo Estevo se harán las últimas reuniones con un grupo muy reducido de técnicos.
LOS TRÁMITES. Países como España, Italia o China pueden presentar cada año una candidatura como máximo ante la Unesco. Si el consejo que se celebra estos días decide que el Ministerio de Cultura respalde la propuesta de la Ribeira Sacra, en septiembre el ministerio tendría que presentar un expediente inicial al Centro de Patrimonio Mundial. Después tiene un plazo para hacer correcciones y a primeros de 2020 presentaría el documento definitivo.
En marzo se le comunicaría al país si se ha aceptado la documentación y, en caso positivo, comenzarían las misiones de evaluación previas, los plazos de corrección y otros trámites que, de avanzar adecuadamente, permitirían un gran examen final en el segundo semestre del año 2021.
Como paso previo a todo el proceso que podría iniciarse ahora, la Xunta de Galicia ya otorgó a la zona la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Paisaje Cultural el pasado mes de diciembre.
