El presidente del consejo regulador de la Denominación de Origen Ribeira Sacra, José Manuel Rodríguez, ha confirmado este luns que los técnicos de la entidad empezarán la próxima semana a evaluar el estado de maduración de la uva en las diferentes subzonas amparadas por la D.O.
Rodríguez señaló que "es un trabajo que hacemos todos los años", y que permite a los viticultores conocer el período más recomendable para el inicio y fin de los trabajos de vendimia.
De hecho, ha comentado a la prensa, se analizarán viñedos de todas las subzonas —Chantada, Amandi, Ribeiras do Miño, Ribeiras do Sil y Quiroga-Bibei— con el objetivo de "conocer a fondo las diferentes microcaracterísticas de la uva en distintos territorios". Con respecto a las fechas, y aún sin conocer el pronóstico oficial de los técnicos, el presidente del consejo avanzó que este año "se volverá a la normalidad".
"Esperamos comenzar después del San Mateo, es decir, a finales del mes de septiembre", puntualizó Rodríguez.
El máximo responsable de Ribeira Sacra también quiso mandar un recado a los medios de comunicación por "sus prisas". "Vienen un par de años tempraneros y ya se piensan que va a ser así siempre, cuando lo normal es lo que se empiece ya entrado el otoño; hay que analizar los datos por lo menos a diez años vista", indicó Rodríguez.
Con respecto a las cantidades, desde el consejo manejan una previsión "similar al año pasado, quizás superior", en torno a los 6 millones de kilogramos de uva —el año pasado la cifra oficial fue de 5,5 millones—. "El año pasado afectaron las heladas y la sequía; este año nos tocaron los hongos —mildiu y botritis y también una zona puntual con granizo", señaló Rodríguez.