El responsable del ecomuseo Pazo de Arxeriz situado en O Saviñao, José Antonio Quiroga Díaz, confía en rematar en el plazo de un mes el proyecto de recreación castrexa consistente en la adecuación de un terreno de 300 metros cuadrados para reproducir una unidad familiar de aquella época de la historia.
Los trabajos consisten en el montaje de una vivienda, un almacén, un patio de trabajo y un granero, pero también en colocar la cubierta de la casa y del resto de los inmuebles con paja. Para ello se ha contratado a un "teitador dos Ancares da parte leonesa, dos poucos que quedan para facer estes traballos e que se chama Juan González", dijo el responsable del museo, quien destacó el excelente trabajo que realiza y que desde hace semanas se ha ralentizado debido a las continuas lluvias que descargan en la Ribeira Sacra.
El proyecto que se espera esté finalizado a finales de diciembre incluye en el espacio del patio un lugar donde acoger a los visitantes interesados en conocer el pasado castrexo, cómo vivía la gente y cuáles eran sus actividades cotidianas. Con esta actuación, la fundación Xosé Soto de Fión pretende potenciar el valor del yacimiento y de las excavaciones realizadas en Arxeriz con el fin de divulgar la cultura castrexa.
Desde el ecomuseo dijeron que la inmensa mayoría de los visitantes que se acercan hasta el castro tienen dificultades para imaginar el poblado, sus viviendas y construcciones asociadas, pero también cómo se podía desarrollar la vida cotidiana y las actividades socioeconómicas.
José Antonio Quiroga avanzó que las construcciones que se habilitan dentro de ese proyecto de recreación histórica contarán con mobiliario diseñado acorde a la época y con paneles explicativos.
Un castro único. El castro de Arxeriz es único en lo tocante a su elevado grado de especialización en el cultivo, almacenamiento y procesado de cereales. Estas actividades aparecieron claramente definidas durante los trabajos de excavación y de investigación llevadas a cabo durante varias campañas a lo largo de los últimos años.
Así, es, según los expertos, uno de los más antiguos e interesantes de los existentes en el conjunto de la comarca de la Ribeira Sacra.
José Antonio Quiroga dijo que son conscientes de su valor y que por ello continuarán con labores arqueológicas, además de aportar elemento recreativos.
