Los productores de cereza de Chantada miran al cielo

La cosecha ecológica de este año mejorará por mucho la del pasado siempre y cuando la lluvia dé una tregua las próximas semanas
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photo_camera Las primeras cerezas, a la vista. A.L.

Los productores de cereza ecológica de Chantada miran estos días al cielo, preocupados por sus cosechas. Creen que el cultivo de este año será mejor que el de 2020, pero todo depende de las lluvias. El agua, muy abundante los últimos días, debe dar pronto una tregua para que la fruta llegue en buen estado a mediados de mayo.

La previsión, según las personas cuestionadas por este diario, es que la variedad de cereza conocida como temperá esté lista para el día 10 del mes que viene, aproximadamente. "Polo momento a floración foi ben e a auga que veu pola borrasca Lola non lles fixo mal, pero se segue chovendo pode prexudicalas", dice Alfonso Regal, responsable de la marca Diego de Lemos, cuya plantación se encuentra en Pincelo.

De la misma opinión es Manuel Lorenzo Novoa, quien tiene sus cerezos en Belesar. "Ten que deixar de chover, pero aparenta ben. Non será como ano pasado, que non houbo cereixas, nin viño nin absolutamente nada", explica.

La cosecha de 2020 fue una de las peores que se recuerdan en Chantada. Ni la temperá ni las variedades más tardías, como la media onza o la portuguesa, salvaron un año marcado por el frío y el mal tiempo durante el periodo de floración. Las pocas que sobrevivieron se encontraron más tarde con más temperaturas bajas y agua, lo que provocó su deterioro.

FERIA. Si la condiciones atmosféricas acompañan, las cerezas ecológicas de Chantada tendrán otra vez protagonismo en los puestos de venta. Con ellas regresará, siempre y cuando la pandemia lo permita, la Feira do Viño e as Cereixas de Belesar.

Hace unos días se anunció la celebración del evento, que alcanzará las 15 ediciones. Desde la organización avanzaron un riguroso protocolo de seguridad contra el covid-19 y señalaron que solo participarán dos bodegas y un total de seis cosecheros de cereza.

Habrá una gran distancia entre todos los vendedores de productos de la feria y no se instalará carpa, por lo que tampoco se organizará la tradicional verbena.

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