La Diputación de Lugo ha decidido redefinir un proyecto que presentó hace algo más de un año, consistente en la construcción en Monforte de una perrera para animales abandonados para cubrir las necesidades de los doce municipios de la Ribeira Sacra y de otros siete de la zona centro de la provincia.
La idea puesta sobre la mesa por el anterior presidente del organismo provincial, Darío Campos, era que ese refugio diese servicio a las comarcas de Sarria, Terra de Lemos, Quiroga y Chantada, una amplia zona en la que son muy pocos los ayuntamientos que disponen de asistencia para recoger perros abandonados.
Monforte tiene firmado un contrato con una empresa de Xinzo de Limia, criticado por los animalistas por su "precaria" efectividad en cuanto a tiempos de atención. Por su parte, Quiroga dispone de una perrera propia de gestión municipal que funciona correctamente. El resto de los ayuntamientos o tienen convenios con la Protectora de Animales de Lugo o no cuentan con ayuda alguna para atender sus necesidades en este sentido.
Fuentes de la Diputación de Lugo señalaron en la mañana de este jueves que si se ha optado por redefinir el proyecto ello ha tenido que ver con la necesidad de que sea más útil y a la vez operativo, "que responda perfectamente a las necesidades de la zona que abarque".
Y es que el plan anunciado por la Diputación de Lugo hace más de un año propició críticas desde los grupos animalistas al entender estos que era improbable que las instalaciones estuviesen preparadas para dar un servicio de calidad a un total de 19 municipios. Temían que se convirtiese en un sitio para dejar los animales a su suerte, con escasa atención, lo que siempre negó la Diputación.
Pontevedra y Lugo
En Galicia, las ciudades con mayor densidad de perros por habitante son Pontevedra (149,04 canes por cada mil habitantes) y Lugo (148,99).