Tres de las cuatro empresas que se dedican a la explotación y tratamiento de pizarra en la comarca de Quiroga han decidido darle vacaciones a sus empleados. La medida adoptada tiene que ver con la crisis sanitaria existente y, a la vez, un modo de no tener que promover un expediente de regulación temporal de empleo (Erte). Así, 160 trabajadores dejan de trabajar hasta el día 13 del próximo mes de abril.
La medida fue acogida con gran satisfacción por el responsable comarcal de Comisiones Obreras (CC.OO.), Mario Docasar.
Este explicó que la firma Piquisa, con 30 empleados; Vilarbacú; con otros tantos; y Ultransa A Campa, con un centenar, decidieron adoptar esta medida “para proteger la salud de sus empleados en momentos tan críticos como los que vivimos, pero también como fórmula para no tener que echar mano de un Erte. La verdad, es de agradecer”, destacó Docasar.
Por el contrario, el sindicalista tuvo duras palabras hacia la cuarta empresa que funciona en la comarca quiroguesa. Se denomina Pizpo (antigua Ferlosa), que, según Mario Docasar, “obliga a la treintena de empleados de los que dispone a trabajar sin que dispongan de las mínimas medidas de seguridad contra el Covid-19, además de encontrarse hacinados en las naves”.
A mayores, la gerencia de Magnesitas de Rubián ha instalado inodoros portátiles en cada sección de la factoría para intentar minimizar los riesgos de contagio
Docasar no dudó en calificar a Pizpo de “empresa pirata” en el sector minero. “Es la única que mantienen su actividad. Si vale de ejemplo, en Valdeorras, donde se concentra la mayor actividad minera del sector de la pizarra, cerraron todos sin penalizar a sus trabajadores”.
MAGNESITAS. En el otro extremo de Pizpo, destacó Docasar, se encuentra la empresa minera Magnesitas de Rubián, ubicada en el municipio de O Incio.
Sus trabajadores acuden por turnos a cada sección, el número justo para mantener una actividad mínima. Todos ellos, indicó el portavoz de CC.OO,, disponen de un kit formado por guantes, mascarillas, gafas de protección y gel hidroalcohólico”.
A mayores, la gerencia de Magnesitas de Rubián ha instalado inodoros portátiles en cada sección de la factoría para intentar minimizar los riesgos de contagio, además de cerrar el comedor común a tal efecto
