Perdido en un cajón y llenándose de polvo

Ocho años después de su presentación por Fomento, nada se sabe del plan de la variante ferroviaria de Monforte ► La primera vez que se planteó esta alternativa fue a principios de los años 90, rechazada por políticos y sindicalistas

Mapa en el que se esboza la variante ferroviaria de Monforte con un ramal al polígono. AEP
photo_camera Mapa en el que se esboza la variante ferroviaria de Monforte con un ramal al polígono. AEP

Solo existe una posibilidad para eliminar los seis pasos a nivel existentes en el casco urbano de Monforte, donde los accidentes por arrollamiento son recurrentes. Se trata de un plan que fue presentado hace ocho años en la ciudad del Cabe por el responsable del Ministerio de Fomento por aquel entonces, el socialista José Blanco, y que había sido aplaudido por todas las fuerzas sociales y políticas del municipio. Casi una década después, el proyecto se encuentra en el cajón de alguna mesa de sabe Dios qué despacho del ministerio, olvidado y llenándose de polvo.

Los agentes socioeconómicos y los partidos políticos piden desempolvarlo para acabar con una situación que consideran extemporánea y que no es otra que la existencia de seis cruces en pleno casco urbano en un tramo de tan solo unos tres kilómetros de vía. La eliminación de los pasos donde han perdido la vida no pocos vecinos es el principal beneficio, pero hay otros.

El valor añadido de una iniciativa que todos reclaman
La variante ferroviaria tendría otros beneficios para los monfortinos, como el haberse descartado la construcción de una nueva estación alejada del casco urbano, apostándose por la actual terminal, unas instalaciones que han jugado un importante papel en el desarrollo social y económico de la comarca de Lemos y que forman parte de la historia de Monforte, ya que su origen se remonta al año 1883.

Un estudio realizado hace 15 años por la asociación de empresarios estimaba en 37 millones el coste de la circunvalación ferroviaria

Además, permitiría mejorar las comunicaciones por carretera con lugares estratégicos, como el polígono industrial y el puerto seco, así como posibilitar ganar en torno a ocho kilómetros cuadrados de suelo urbanizable y convertir en avenidas las líneas férreas que queden en desuso.

Desde el Ministerio de Fomento se destacaron en su día, hace ocho años, estas ventajas derivadas de la construcción de la variante ferroviaria

Otro punto a favor del proyecto que se reclama sea retomado es la posibilidad de hacer una futura estación de mercancías en las afueras de Monforte, minimizar el efecto barrera que las vías tienen en el núcleo urbano y poder evitar la inversión de la marcha para las circulaciones Ourense-León

¿Cuánto costaría construir la variante ferroviaria?
El Ministerio de Fomento no se refirió en ningún momento al coste de la construcción de la variante ferroviaria de Monforte, pero existe una aproximación presupuestaria hecha en su día por la asociación de empresarios de la ciudad, pioneros en cuanto a la reclamación para que se materizalizase esta propuesta.

Hace justamente 15 años, este colectivo dio a conocer un proyecto que luego fue calcado por el Ministerio de Fomento. En él se estimaba una inversión de 37 millones de euros.

Para la llamada variante sur, un desvío de la vía procedente de Ourense a la altura de A Bastida para bordear el monte de Piñeira, atravesar la carretera a Castro Caldelas, la Nacional 120 y conectar con la denominada vía a Castilla a un kilómetro de la estación, el coste se fijó en 22 millones de euros. El segundo ramal de la variante, que saldría del puerto seco y conectaría con la línea a Castilla en la parroquia de Chavaga, lo que posibilitaría que los trenes no tuviesen que realizar transbordos ni cambios de máquinas en la estación, tendría un coste de 15 millones.

Una oportunidad perdida por miedos imaginarios
El plan de la variante ferroviaria de Monforte es incluso anterior al detallado documento redactado por los empresarios del municipio expuesto hace tres lustros. Hay que remontarse a principios de los años 90, a unos 25 años atrás, para saber que el ministerio había puesto sobre la mesa esta solución, algo que los partidos políticos y los sindicatos rechazaron totalmente al considerar que ello significaría el finiquito de la estación del tren.

Era un momento en el que esta no pasaba por sus mejores momentos, ya que había un goteo constante de pérdida de servicios y de peso del que en sus orígenes fue uno de los mayores nudos del transporte ferroviario de España.

Fue de tal magnitud la negativa a la construcción de la variante que en la hemeroteca se pueden ver las varias manifestaciones realizadas en la ciudad, masivas, negando algo que consideraban era el fin de Monforte como ciudad ferroviaria.

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