Monforte se suma a la campaña de prevención 'Menores ni una gota'

El proyecto, impulsado por la Federación Española de Bebidas Espirituosas, trata de evitar el consumo de alcohol entre los jóvenes

Un botellón en la Alameda de Santiago, antes de su prohibición
photo_camera Un botellón en la Alameda de Santiago, antes de su prohibición

El Ayuntamiento de Monforte se ha sumado al proyecto Ciudades en Red Menores ni una gota, una iniciativa promovida por la Federación Española de Bebidas Espirituosas (Febe) y el Ministerio de Sanidad que pretende conseguir el apoyo de instituciones públicas y privadas para impulsar acciones destinadas a la prevención del consumo de alcohol por parte de menores de edad.

El alcalde, José Tomé, firmó el documento de adhesión a esta iniciativa, convirtiendo a la ciudad del Cabe en uno de los ayuntamientos que muestran su compromiso y preocupación por esta problemática. La red dispone ahora mismo de más de 400 ciudades que trabajan codo con codo para llevar a cabo el proyecto.

Uno de los objetivos principales es desarrollar actividades de información y prevención, dirigidas tanto a menores como a sus familias. La idea es dotarles de herramientas que les permitan enfrentarse a un posible consumo precoz de bebidas alcohólicas.

La página web del proyecto, www.menoresniunagota.es, pone a disposición de todos y de manera gratuita un manual elaborado por la psicóloga Rocío Ramos Paúl titulado"Más de 100 razones para que un menor no beba alcohol. La guía recopila una serie de consejos y herramientas con las que las familias pueden abordar y prevenir el consumo de alcohol en sus hijos.

Según Luisa Astray, educadora social del centro de drogodependientes de la ciudad del Cabe, el principal problema relacionado con el alcohol entre los más jóvenes es la cada vez más temprana edad con la que acceden a este tipo de bebidas. "El último estudio a nivel nacional salió el año pasado y fijó que la edad a la que empiezan a beber alcohol está ya en los 13 años. Está bajando muchísimo", reconoce la especialista.

CONSUMO. Sobre el caso concreto de la ciudad del Cabe, Astray reconoce que el consumo entre los menores existe. "Sabemos que se hacen botellones aunque no son a gran escala, por lo que más o menos la situación está controlada. Sí hay casos en el hospital de comas etílicos de menores, pero de momento nosotros no ofrecemos asistencia a jóvenes con problemas derivados directamente del consumo".

El centro de drogodependientes de Monforte es uno de los principales colaboradores de la campaña. Desarrollará actividades durante los próximos meses dirigidas sobre todo a padres. "A este nivel, la familia es la única que puede hacer algo para tratar de poner remedio a esta grave situación", dice Astray, quien, sin embargo, afirma que no se han recibido casos de alcoholismo entre menores de edad, pero sí de consumo de estupefacientes.

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