La Xunta de Galicia ha iniciado una campaña de sondeos geotécnicos en la zona del hundimiento de la carretera LU-651, en O Courel, cerca de la localidad de Santa Eufemia, tras venirse abajo la ladera de un montes el pasado 20 de marzo. Las prospecciones geológicas se llevan a cabo para definir las obras necesarias para restituir la vía.
Desde la Consellería de Infraestructuras señalaron que las labores tienen como fin conocer en profundidad el estado y el comportamiento del terreno con el fin de poder evaluar la viabilidad de las distintas alternativas para el restablecimiento de la conexión viaria, el principal de acceso a la capitalidad de O Courel, Folgoso, y a otras poblaciones.
En el marco de estas intervenciones, también se realiza estos días un levantamiento topográfico con la utilización de drones. Una vez obtenida toda la información precisa, la Xunta espera que en las próximas semanas se pueda determinar la alternativa elegida y un calendario de realización de las obras, siendo la seguridad y la agilidad en la ejecución de los trabajos los factores más importantes que se deben considerar, destacaron desde el departamento de Infraestructuras.
Esta vía de acceso a O Courel desde Quiroga permanece cortada al tráfico a consecuencia del desprendimiento registrado a la altura del kilómetro 18 de la carretera LU-651, entre Santa Eufemia y Folgoso, el pasado 20 de marzo.
Tal y como se comprometió la conselleira de Infraestructura, Ethel Vázquez, en su reciente visita a la zona, la Xunta trabaja desde el primero momento, analizando las alternativas posibles para restablecer, lo antes posible, la comunicación viaria.
No obstante, cualquiera de las soluciones que acuerden los técnicos tendrá un plazo de ejecución que se prolongará durante al menos dos años.
Las soluciones. Los técnicos de Ethel Vázquez señalaron que existen cuatro soluciones para restablecer la vía a lo largo de los casi 300 metros que se han venido abajo. La primera es la construcción de un viaducto que salve el vacío originado al desprenderse el tramo de carretera.
También se contempla la ejecución de un nuevo trazado para la vía, que podría hacerse o bien por medio de un falso túnel o un desmonte. La última posibilidad es habilitar un túnel que esquive el ámbito de actuación de la cantera de pizarra que opera en la zona del suceso.
En la opción que se elija tendrá mucho que ver ese estudio geotécnico y la afección de las minas subterráneas de la pizarrera Ultransa en cuanto a su afección sobre la estabilidad del subsuelo de esta zona.
