La firma Nubian Properties, que forma parte del grupo Hotusa, trabaja estos días a contrarreloj para poner a punto los jardines y todas las instalaciones del hotel Palacio de Sober de cara a su inminente apertura, que se producirá antes de que finalice el mes de junio.
Se trata de una fecha definitiva después de que en el pasado mes de marzo se especulase con la posibilidad de que entrase en funcionamiento en Semana Santa, algo que al final no ocurrió por la magnitud de los trabajos de rehabilitación y limpieza necesarios.
Entre otras tareas, fue preciso revisar la cubierta de todas las edificaciones y el sistema eléctrico, entre otros muchos trabajos de mantenimiento llevados a cabo después de permanecer cinco años cerrado.
Estos días, unas 30 personas de diferentes empresas contratadas por Nubian Properties están dejando a punto la parte exterior e interior del complejo hotelero. Al mismo tiempo, en la oficina de empleo de Monforte se busca a personas en el paro interesadas en trabajar en Sober. Aunque no se especifica el centro de empleo los perfiles apuntan a que se trata del establecimiento turístico
POR 2,4 MILLONES. El hotel Palacio de Sober lleva cerrado desde 2014, cuando la empresa constructora y gestora, Alvaher 98, entró en concurso de acreedores.
En la oficina de empleo de Monforte se busca a personas en el paro interesadas en trabajar en Sober
Nubian Properties se hizo con las instalaciones después de un largo proceso judicial y tras abonar por las mismas 2,4 millones de euros. En su origen, el complejo funcionó con la categoría de cinco estrellas gran lujo.
Los actuales empresarios trabajan en el desarrollo del plan de explotación del mismo, pero no se descarta que acoja huéspedes en régimen ordinario y que se especialice en la organización de eventos. De hecho, también se pondrá en funcionamiento la cocina y el gran comedor que posee.
RENDIMIENTO. Hotusa desplazará hasta Sober a sus mejores directivos para la puesta en marcha del hotel, pues desea encarrilarlo y que sea un referente para el turismo creciente de la Ribeira Sacra.
Sin ir más lejos, está situado en una zona excepcional, como es la capital del vino de Amandi, muy cerca del embarcadero que surca el cañón del Sil y a tan solo a diez minutos en coche de Monforte, por lo que se cree que el éxito, con unos precios ajustados a la demanda, está garantizado.