El embalse de Belesar, culpable de los terremotos en Taboada

Hay estudios que apuntan que la presión del agua afecta a las fallas de la litosfera

Zona de Ponte Mourulle donde se localizan la práctica totalidad de los epicentros de los microterremotos. AEP
photo_camera Zona de Ponte Mourulle donde se localizan la práctica totalidad de los epicentros de los microterremotos. AEP

Especialistas en geología y sismología están convencidos de que no se trata de algo casual que en pocos años se hayan registrado más de 200 pequeños terremotos, que no llegan a los tres grados de magnitud, junto al río Miño, en el embalse de Belesar, en una zona muy acotada, situada entre los ayuntamientos de Taboada, O Saviñao y Chantada, más concretamente en Ponte Mourulle. Existen algunos estudios que hablan de la presión que ejerce el agua embalsada sobre las fallas de la litosfera, lo que propicia compresiones y dilataciones del terreno.

El eminente catedrático en Geología Juan Román Vidal Romaní explica que, "normalmente, cuando vemos los mapas con los epicentros de los terremotos podemos comprobar que esos puntos coinciden con fallas, que al moverse generan los sismos. Pero en Galicia hay otra particularidad, que es que la de que la mayor parte de los ríos están ocupados por embalses".

En este sentido, Vidal Romaní dice que, a veces, "los ríos coinciden con fallas o fracturas. Cuando el agua se acumula en un embalse hidroeléctrico lo que hace es que, en un breve espacio de tiempo, el peso gravitando en el lecho aumente mucho y muy rápidamente. Así, la corteza, la litosfera se comprime, lo que hace que las fallas se cierren. Pero cuando la presa, porque el agua se utiliza para la producción de energía eléctrica, se vacía, entonces lo que estaba comprimido se relaja y eso puede provocar que el terreno a ambos lados de la falla se mueva y se produzca así un terremoto".

El geólogo aclara que normalmante los sismos más frecuentes en Galicia tienen valores muy bajos en su magnitud, como ocurre en los casos de sismicidad inducida por un embalse hidroeléctrico. Destaca que está claro que entre Taboada y O Saviñao, "donde se sitúa uno de los embalses más importantes de Galicia, a las fallas existentes se une ese efecto de carga y descarga del embalse, provocando pequeños seismos".

El último que tuvo lugar fue el pasado martes, de 1,5 grados de magnitud.

Un caso similar al de Taboada se produce en el embalse de Riaño, en León, construido sobre la falla de Ventaniella.

Juan Ramón Vidal Romaní también puso como ejemplo de la relación entre las fuerzas de presión y los terremotos lo ocurrido en el depósito Castor del Mar Mediterráneo, frente a la zona de Amposta, que estaba asociado a una gran falla.

Allí el yacimiento de petróleo que había sido explotado hace muchos años, una vez vaciado, se quiso transformar en un depósito de gas. "La presión inducida por la inyección del gas a presión lo que hizo fue movilizar la falla provocando en la zona una gran cantidad de pequeños terremotos", concluyó el geólogo.

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