Una delegación del juzgado de primera instancia e instrucción de Monforte, en compañía de agentes de la Policía Nacional, desalojó en la mañana de este miércoles a un okupa de una vivienda del edificio con el número 40 de la Rúa Ourense. La casa se encontraba ocupada desde hacía ocho meses, cuando sus propietarios, unos vecinos de la ciudad del Cabe que residen en Santiago, llegaron a pasar unos días de vacaciones y comprobaron que no podían acceder a ella al haber entrado personas desconocidas que habían cambiado la cerradura.
Se sabe que el domicilio, el primer piso de esa vivienda, fue okupado en el mes de septiembre de 2018 por cuatro personas y que hasta este miércoles pasaron por ella muchas otras hasta quedar solamente una.
Hubo un detenido, acusado de vender electrodomésticos que robó en otros pisos del edificio
Los representantes del juzgado monfortino tuvieron que requerir la presencia de un cerrajero para abrir la puerta de la casa, ya que el único okupa que se encontraba en su interior se negaba facilitar la entrada. Una vez en su interior, la Policía Nacional se encontró con otro problema, el del hombre encerrado dentro de una habitación del inmueble, que también fue necesario forzar.
Se trata de una persona de poco más de 20 años de edad y de nacionalidad española, que fue detenido acusado de un delito de usurpación, pero también por otro de robo, ya que, según parece, entró en otros pisos del inmueble que se encuentran deshabitados para hacerse con los electrodomésticos y vendérselos a terceras personas.
Según pudo saber este diario, el piso okupado por este joven estaba "desmantelado y hecho una porquería, con cagadas de perro (tenía uno en la casa) por todas la habitaciones. El hedor era realmente insoportable", dijeron.
