La Guardia Civil y el Ayuntamiento de Bóveda tienen en marcha sendas investigaciones para descubrir quién sabotea la traída de aguas municipal y deja sin suministro a los vecinos. En concreto, decenas de habitantes de Rubián y Boveda se quedaron sin servicio por culpa de estos hechos.
Según detalló el alcalde, el popular José Manuel Arias, los problemas comenzaron la semana pasada cuando se quedaron sin agua los vecinos del núcleo de Rubián. Después de que los operarios revisasen tuberías y arquetas de la traída en busca de cualquier tipo de averías o fugas descubrieron que alguien había manipulado una llave de paso y vaciado los depósitos. Al no haber agua almacenada no llegaba ni una gota de suministro a los residentes en Rubián.
Este viernes los que se levantaron sin agua fueron los vecinos de la capitalidad municipal, Bóveda. De nuevo, desde el Ayuntamiento se ordenó una revisión de la red para dar con el punto de la avería, pero lo que se encontraron los trabajadores fue que alguien había alterado varias llaves y que ello había provocado que se vaciasen las tuberías.
El alcalde, José Manuel Arias, insistió ayer en que se trató de una especie de «sabotaje» y puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil, que tiene en marcha una investigación para descubrir a los posibles autores.
Además, desde el Ayuntamiento harán sus propias pesquisas, ya que este tipo de acciones "prexudican aos veciños directamente e supoñen un custo importante para as arcas públicas", insistió José Manuel Arias.
