El Concello registrará la muralla de los Lemos como propiedad municipal

El alcalde intenta desde 2017 que la Xunta de Galicia asuma la propiedad de la fortaleza, sobre la que proyecta planes de recuperación, pero todas las gestiones cayeron en saco roto
Parte de la muralla del complejo de San Vicente do Pino. EP
photo_camera Parte de la muralla del complejo de San Vicente do Pino. EP

La corporación del Ayuntamiento de Monforte, gracias a la mayoría absoluta del PSOE y a propuesta de este partido, aprobará en la sesión plenaria del próximo lunes inscribir la muralla de San Vicente do Pino, la antigua fortaleza de los condes de Lemos, como bien municipal.

Desde el equipo de gobierno no quisieron adelantar los motivos de esta acción. Solo se sabe que existe un informe de la secretaría municipal pedido por la alcaldía para saber si era posible registrar la muralla como patrimonio local.

Este departamento municipal cree que sí, sobre todo, después de que en 2017 el Ayuntamiento le pidiese a la Xunta que se hiciese cargo de la muralla y de su rehabilitación y el Ejecutivo gallego diera la callada por respuesta.

Así, echando mano de aquella petición y del silencio administrativo de la Consellería de Cultura, según el informe de la secretaría de la administración local, es posible registrar este bien como propio, a excepción del tramo de muralla propiedad de Turespaña, la gestora del Parador de Turismo, que va desde la Torre da Homenaxe a un cubo amurallado conocido como el de Os Cregos y que este organismo público dijo, años atrás, que lo rehabilitaría. Aunque a día de hoy sigue igual.

RESTAURACIÓN. Por lo que respecta a la Consellería de Cultura, el Ayuntamiento lleva desde 2017 incidiendo en proyectar trabajos de restauración en la muralla. Existe un amplio informe realizado por la Xunta en el que se indica que hay zonas en las que la intervención no sería excesivamente costosa, como en el trayecto que va hasta la torre de O Arco.

Lo mismo se apunta sobre los tramos inmediatos a la Porta Nova y hasta la torre de Os Cregos, donde la muralla está en bastante buen estado de conservación, con sus todavía existentes pasos de ronda, almenado, saeteras y demás elementos correspondientes a la misma, que darían una idea real de cómo se realizaba su defensa y al mismo tiempo serviría como modelo en el caso de una restauración integral de todo el conjunto de la fortaleza.

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