La complejidad de la restauración de la iglesia del Cardenal ralentiza la obra

Es preciso hacer un estudio del suelo y un proyecto para distribuir las cargas del andamiaje
photo_camera Inicio el martes de la colocación del andamiaje tras el tapado del retablo. EP

El proyecto de restauración de una zona de la iglesia del colegio del Cardenal de Monforte, obras financiadas por la Xunta de Galicia con 420.000 euros, se ralentiza debido a la complejidad de las actuaciones. El plan se ideó para solucionar las grietas y desajustes en elementos pétreos del presbiterio provocados por el célebre terremoto de Lisboa de 1755 y, aunque no comprometen la estabilidad de las bóvedas, se ha considerado preciso corregir. El plazo de ejecución de los trabajos se fijó en seis meses, pero podía retrasarse tras constatarse la necesidad de actuar con mucha cautela.

Y es que tanto los restauradores como los arqueólogos que intervienen han visto necesario realizar un estudio de cargas para el montaje del armazón que llegará hasta el arco donde se trabajará. Para ello ha sido necesario levantar piedras del solado para conocer la estabilidad del suelo.

Asimismo, para los trabajos de consolidación de las piezas de lo alto de la bóveda es necesario desmontar tres grandes escudos de madera situados en la parte más alta del retablo obra de Francisco de Moure. Actualmente se analizan las mejores opciones y el modo de conservarlos, y a la vez aplicarles un tratamiento anticarcoma, hasta que vuelvan a ser colocados en su sitio.

En el pasadizo tras la iglesia que une los dos claustros hallaron amianto que una empresa especializada tendrá que retirar

Desde el colegio del Cardenal señalaron que se trata de una obra "verdaderamente compleja", pero se mostraron satisfechos "por el buen hacer de todos los especialistas involucrados en este proyecto".

Otras tareas incluidas en el proyecto que sufraga la Xunta de Galicia es el adecentamiento de un paso que discurre por la parte trasera de la iglesia y comunica los dos claustros que tiene el colegio del Cardenal.

AMIANTO. Se pensaba que solamente sería necesario levantar los techos y actuar sobre la estructura de madera antes de volver a dejar todo como estaba, pero la empresa adjudicataria se encontró con un imprevisto, que no fue otro que la existencias de planchas de amianto.

Se desconoce cuándo fueron colocadas en este lugar, pero ha sido preciso contactar con una empresa especializada en la retirada de este tipo de material, ya que los operarios tienen que ir altamente protegidos para prevenir contaminarse con este elemento altamente cancerígeno, pero también para su almacenamiento en un transporte habilitado al efecto con el fin de llevarlo a un vertedero específico y autorizado.

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