La Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) se ha comprometido a reponer todo lo hecho en la zona situada entre los barrios de A Pinguela y Cobas, que dos intensas riadas se llevaron por delante poco después de que acabasen los trabajos de regeneración medioambiental de este espacio, que atraviesa el río Cabe en su trama urbana.
Los daños fueron cuantiosos, ya que la fuerza del agua se llevó por delante todo lo realizado por un importe de 600.000 euros con la finalidad de mejorar un espacio de alto valor natural y garantizar que una laguna existente en el lugar, anexa al cauce, disponga de agua en verano gracias a una pequeña presa.
El responsable de la CHMS, José Antonio Quiroga Díaz, indicó en la tarde de este martes que "xa traballamos no proxecto de reposición dunha desfeita producida por unha enchenta histórica do Cabe". Y es que según los datos de la confederación, el río pasó en solo un día de los 0,90 metros de altura a los 3,5.
Quiroga Díaz indicó que esta circunstancia indeseada propició que la riada en A Pinguela arrastrase todo lo que había, ya que la obra estaba recién hecha y aún no había dado tiempo a que se crease el tapiz vegetal natural, que ayudaría a consolidar el terreno.
El presidente de la CHMS señaló que han analizado los desperfectos y que se ha creído conveniente crear unas escolleras que canalicen el río y así impedir en un futuro que avenidas similares a las acontecidas semanas atrás vuelvan a producir desperfectos de tal magnitud.
Otra de las acciones proyectadas es cambiar el tipo de la presa desmontable. La actual dispone de unos báculos en vertical que resultan inservibles en caso de crecidas, ya que entre ellos se quedan atrapados troncos y ramas que arrastra el río.
Por ello ya se pensó en colocar, cuando se rehabilite de nuevo la zona, otros abatibles para evitar ese problema.
Por el momento no hay fecha de inicio de los trabajos de reposición de todo lo dañado, pero estos podrían comenzar en verano.