La LU-P-1002, en Carballedo, acapara críticas por el grave estado de deterioro del firme

La conducción es especialmente dura para un vecino que circula con un vehículo adaptado
Dos coches se cruzan en uno de los tramos más conflictivos de la LU-P-1002. EP
photo_camera Dos coches se cruzan en uno de los tramos más conflictivos de la LU-P-1002. EP

No es la primera vez que la carretera LU-P-1002 acapara las críticas de los vecinos de Carballedo. Hace dos años que advirtieron del elevado nivel de deterioro de su firme, que la hacen incluso peligrosa para la circulación en algunos tramos. El problema continúa y una de las últimas iniciativas la ha encabezado un vecino que conduce un coche adaptado por una discapacidad.

Los baches son de tal tamaño que en varios tramos es necesario invadir el carril contrario o reducir la velocidad casi al máximo para que los vehículos no sufran deterioros. Aun así, varios usuarios de la vía han tenido que pasar por el taller con severos estropicios en sus coches.

Se trata de la carretera que une la capitalidad del municipio, A Barrela, con Cartelos. En esta zona reside el vecino afectado, que pide el arreglo integral de la infraestructura para que su circulación por la misma, que es prácticamente diaria, sea más cómoda. Según describe, padece un grado de discapacidad alto y siente molestias importantes cada vez que pega un volantazo o invade el carril de sentido contrario para esquivar los inmensos boquetes.

Uno de los tramos más conflictivos se encuentra en una curva. Nada más salir de ella, los usuarios se encuentran con varios baches de gran tamaño y muchas veces, cuando se cruzan con un vehículo que viaja en dirección contraria, se ven obligados a detenerse y esperar a pasar al carril contrario.

Lo curioso es que a escasos metros de la LU-P-1002 pasa el tramo recientemente abierto de la A-56, entre A Barrela y San Martiño (Ourense). El firme de una contrasta de manera radical con el de la otra. El asfalto impoluto propio de una autovía que acaba de ser inaugurada es el polo opuesto a los baches que parecen cráteres de la carretera provincial.

Antecedentes. Una asociación de vecinos llamada Arransallo protestó varias veces para intentar que se arregle la carretera, de titularidad provincial. Por ella pasan cada día numerosos tractores y camiones para trabajar en las granjas y explotaciones que hay por los alrededores, en los que también hay unas instalaciones que pertenecen a la cooperativa Aira.

El colectivo envió varios escritos al Concello a los que ahora se unen los correos electrónicos a la Diputación emitidos por el vecino cuestionado por este diario, que demanda soluciones de forma desesperada. Reconoce que de vez en cuando se llevan a cabo labores de bacheo, pero advierte de que su efecto dura muy poco tiempo, un problema que se da igualmente en la carretera nacional N-540.

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