Calcinados 200 rulos de hierba almacenados en una nave de Chantada

El incendio se produjo cerca del santuario abandonado de Fátima, en Centulle, y pese a su agresividad no provocó ningún daño personal
photo_camera Una persona ayuda en las labores de extinción del incendio de ayer en Chantada.

miguel piñeiro

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CHANTADA. Un voraz incendio calcinó ayer 200 rulos de hierba almacenados en el interior de una nave en Chantada. El lugar donde se guardaba el material afectado se encuentra cerca del santuario abandonado de Fátima, en el núcleo de población de Centulle.

El 112 dio la advertencia alrededor de las 19.00 horas. Hasta el punto donde se originó el fuego, en la parroquia de San Xurxo de Asma, se desplazaron efectivos del parque comarcal de bomberos, la Policía Local, la Guardia Civil y Protección Civil. También se acercaron numerosos vecinos, atraídos por la agresividad de las llamas y ante la posibilidad de que fuese necesario prestar ayuda en las labores de extinción.

A pesar de los importantes daños materiales ocasionados por el incendio no hubo que lamentar heridos. Fuentes consultadas por este diario afirman que la intervención fue muy rápida y evitó que el fuego se propagase.

Un vecino de Chantada guardaba en el interior de la nave los 200 rulos de hierba que ardieron durante el suceso. Las primeras hipótesis apuntan a un acto vandálico, por lo que se trataría de un incendio intencionado.

Varios testigos apuntaron, además, que el ambiente en el entorno de la nave calcinada era irrespirable a los pocos minutos. La hierba seca quemada levantó una densa cantidad de humo y el olor no tardó en propagarse por los alrededores.

En el entorno se encuentra, además de la iglesia en desuso que iba a dedicarse a la virgen de Fátima, un edificio abandonado diseñado con el fin de albergar un centro para inválidos civiles. El inmueble permanece en ruinas y nunca llegó a funcionar.

La nave en la que el particular afectado guardaba los rulos de hierba calcinados se encuentra pegada a dicha residencia. Algunas de las personas que se desplazaron hasta el lugar destacaron que era el espacio donde se habilitarían los talleres para los usuarios.

No hubo que lamentar heridos y el fuego no llegó hasta las casas, pero resultó duro apagarlo. Por esa razón fue necesaria la intervención de brigadas forestales, que acudieron al punto del suceso para ayudar a sofocar las llamas.

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