La Audiencia de Lugo toma medidas inéditas para proteger a tres víctimas de abusos

Mediante un auto, el tribunal borra párrafos enteros del escrito público de acusación y alerta a los medios sobre la gravedad del caso ► Al acusado se le atribuyen tocamientos a tres sobrinas de su mujer cuando eran menores de edad y durante más de diez años
El acusado, este jueves en la Audiencia de Lugo. XESÚS PONTE
photo_camera El acusado, este jueves en la Audiencia de Lugo. XESÚS PONTE

La Audiencia Provincial de Lugo adoptó este jueves una medida excepcional para salvaguardar a tres mujeres, dos hermanas y una prima, que cuando eran menores de edad supuestamente fueron víctimas de abusos por parte de su tío político, en la zona de Monforte de Lemos, durante más de diez años. Mediante un auto, el alto tribunal lucense limitó la publicidad que se le dio al escrito de acusación de la Fiscalía —borró párrafos enteros— y solicitó a los medios que no facilitasen ningún dato que pudiera revelar la identidad de estas jóvenes. 

La vista se inició con la declaración del encausado, que negó los hechos que se le atribuyen, y luego los representantes de los medios de comunicación fueron desalojados de la sala —esta medida sí suele ser más habitual— durante las declaraciones de las víctimas para resguardar así su intimidad en un caso de tanta gravedad. 

El ministerio público considera que el acusado es autor de tres delitos continuados de abusos sexuales a menores de 13 años, por los que solicita una condena total de 32 años de prisión. Pide también que, una vez finalizada la pena de cárcel, cumpla otra condena de 8 años de libertad vigilada. 

En su escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía solicita además que el hombre no se pueda aproximar a las víctimas —las tres eran sobrinas de su mujer— ni comunicarse con ellas por ningún medio durante un periodo de 16 años y que las indemnice en la cantidad de 30.000 euros a cada una por los daños morales que supuestamente les ocasionó. "Como consecuencia de estos hechos, las víctimas sufren daños psicológicos, como trastornos adaptativos y trastorno por estrés postraumático, continuando a tratamiento en la actualidad", según expuso la Fiscalía en el juicio. 

OTRO CASO. Según quedó recogido en el escrito de acusación de la Fiscalía lucense, el hombre también abusó entre los años 1996 y 1998 de otra de sus sobrinas políticas cuando quedaba a su cuidado, "dado que pasaba con ella cada domingo y días de verano en un domicilio familiar". El ministerio fiscal mantiene que, "utilizando el pretexto de jugar", la introducía en su vehículo y allí le realizaba tocamientos. 

Sin embargo, con respecto a este cuarto caso, la Fiscalía lucense recuerda que la chica no presentó denuncia por estos acontecimientos hasta el 28 de septiembre de 2016 —ante el juzgado de Instrucción número 1 de Ourense—, cuando los hechos ya habían prescrito

Las otras tres sobrinas, las que declararon este jueves como víctimas, también presentaron denuncia ante el mismo órgano judicial en la misma fecha, pero en su caso los delitos todavía no habían prescrito, ya que los abusos se cometieron supuestamente entre 1999 y 2012. En los tres casos, la fiscal acusa al procesado de aprovechar los momentos en los que quedaba a cargo de las menores, o en las reuniones en el domicilio familiar, para realizar tocamientos a las niñas "en las zonas genitales". 

La representante del ministerio fiscal preguntó al acusado si jugaba con ellas "a que eran modelos" y si les decía que les iba "a sacar fotos" jugando, pero el hombre negó rotundamente todos estos aspectos. 

A pesar de la tensión que podría acarrear un juicio por unos hechos de tal gravedad como un supuesto abuso sexual a menores de edad, y más tratándose de personas con relación familiar, la vista oral por este caso discurrió sin ningún tipo de incidente y las partes compartieron pasillo durante toda la mañana sin lanzarse ningún tipo de reproche.

"Detrás de todo esto tiene que haber una mano negra"
"Yo no abusé de nadie y detrás de todo esto tiene que haber una mano negra". Con estas palabras se defendió este jueves el hombre acusado de abusar sexualmente de tres sobrinas. El acusado asegura que "nunca" tocó a las menores ni les propuso ningún juego con el objetivo de abusar de ellas. Además, mantuvo que ni tan siquiera se quedaba a solas con las niñas durante las celebraciones familiares . "Yo no hice nada y no me explico por qué me denunciaron, pero tienen que estar bien aleccionados por alguien, una mano negra".

El hombre explicó que se enteró de sus acusaciones cuando lo fueron "a buscar a casa" y contó que nunca mantuvo contacto posterior con las familias de las menores para pedirles explicaciones por la denuncia. "Mi mujer y mi hija las llamaron por teléfono, pero no les dijeron nada", alegó. 

El acusado respondió así a las preguntas de la fiscal, pero se negó a declarar ante la letrada de la acusación particular y su propia abogada no le realizó preguntas, por lo que su testimonio se limitó a negar los hechos y a dejar caer la existencia de un complot en su contra.