La cooperativa Aira experimentó en tres años un crecimiento superior al 25%. Además cerró 2020 con una facturación de 125 millones de euros, diez millones más que en 2019, lo que supone un aumento del 8,9% respecto al ejercicio anterior.
La entidad agraria dio a conocer estos y otros datos durante su asamblea anual de socios, celebrada este miércoles en el pabellón de deportes de Taboada. Es la primera que se lleva a cabo desde que estalló la pandemia, motivo por el que se dio a conocer en la misma sesión el balance económico de 2019 (que estaba pendiente) y el de 2020.
El director general de Aira, Daniel Ferreiro, destacó la consolidación del proyecto iniciado en 2018 para integrar en una misma cooperativa Agris, Icos, Cogasar, Coelplan y la propia Aira. "Crecemos todos los años a un ritmo sostenible, por encima del 8% en estos dos últimos ejercicios, y lo hemos hecho en todas las áreas", apuntó.
Ferreiro explicó a los socios que el incremento de la facturación ha sido posible gracias al incremento del "volumen de actividades y servicios prestados, lo que nos permite ser más competitivos y generar mejores resultados".
INVERSIÓN. La cooperativa destinó alrededor de doce millones de euros a este apartado. La transformación de la leche y la mejora del parque de maquinaria son las prioridades marcadas por Aira.
Una de las principales apuestas se desarrolla en la planta de transformación láctea Galacteum, en Melide. En tres años de trayectoria, la inversión en esta industria supera los 22 millones de euros.
Por otro lado, en la actualidad se comercializan en Aira 115 millones de litros de leche. Ferreiro añadió que se transforma un 50% de la cantidad total recogida.
Esta apuesta ha permitido a la entidad "aumentar el precio de la leche pagada" a los ganaderos en un momento de "incremento de los precios de producción derivado de las subidas de las materias primas y la electricidad". Según Aira, este contexto pone a las ganaderías gallegas "en situaciones realmente complicadas".
