El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) trabaja a todo meter para mejorar la vía férrea entre Monforte y Ourense. Con una inversión de 7,3 millones lleva a cabo diferentes actuaciones para que el trazado, de 46 kilómetros, disponga de las mejores condiciones de seguridad para que puedan circular los trenes Avril, de alta versatilidad y muy alta velocidad de la empresa ferroviaria española Patentes Talgo. Una de las mayores acciones que se llevan a cabo es el recrecido de varios túneles que hay en el trayecto para adaptarlos a ese tipo de convoys.

Dentro de este presupuesto se incluye el tratamiento de siete puentes y de nueve trincheras que hay en la línea. También se mejora el drenaje de la vía mediante la construcción de nuevos elementos y la limpieza y adecuación de los ya existentes.
El plan se completa con el cerramiento de la vía en zonas urbanas y pasos viciosos en distintos puntos de los 46 kilómetros del tramo Ourense-Monforte.

Electrificación
Al mismo tiempo, desde finales del pasado mes de noviembre, Adif moderniza la línea eléctrica que surte de energía a los trenes que circulan entre las ciudades del Cabe y As Burgas. Se trata de un proyecto valorado en 24,3 millones de euros.
La actuación consiste en adecuar la catenaria de la línea férrea a 25 kV. De esta forma, se equiparará con la electrificación que se instala en el trazado, hasta ahora no electrificado, entre Monforte y Lugo, obras a las que se destinan otros 17,2 millones de euros.
Todas estas acciones tienen como fin acercar la alta velocidad ferroviaria a Lugo, para que los vecinos de la capital lleguen en el menor tiempo posible a coger un enlace de los trenes Ave que salen de Ourense con destino Madrid.
Complemento
De forma paralela, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha iniciado una modernización integral de la estación de Monforte, en la que invierte tres millones de euros.
Se actúa en los andenes y se instalará un ascensor para que los viajeros puedan acceder a estos cómodamente.
Se trata de una obra que ha dejado inutilizada la terminal monfortina por primera vez en sus 140 años de historia.
Mientras duren las obras más gruesas, que se esperan estén rematadas a finales de este mes, los buses suplen a los trenes para mover a los viajeros.