El embalse de Belesar (Chantada) ha vuelto a aliviar agua después de las fuertes lluvias caídas en los últimos días.
La inmensa presa construida sobre el río Miño hace más de 55 años y gestionada por Naturgy rondaba el 90% de su capacidad, de ahí que se procediera a abrir uno de sus tres aliviaderos.
Algunos vecinos se desplazaron hasta los alrededores del embalse para observar la caída del agua, un hecho que siempre llama la atención por su espectacularidad.
La última vez que se abrió el embalse fue a finales de 2019.