Todo sigue igual en A Chaira, un lugar del municipio de Pantón en el que Iberdrola construyó entre los años 1945 y 1956 doce edificios de diferentes tamaños y hasta una iglesia, un conjunto de viviendas y oficinas diseñado para ser ocupados por el personal más cualificado que trabajó en la construcción de la presa de Santo Estebo de Ribas de Sil.
El complejo abandonado hace más de 30 años se mantiene en pie pero en un estado de conservación lamentable. Iberdrola tapió años atrás la entrada a los inmuebles y posteriormente instaló una valla perimetral para impedir el acceso al recinto.
A día de hoy, es valla está reventada en dos puntos y algunos tapiados realizados en las puertas y ventanas de as construcciones han sido derribados para poder acceder al interior de ellas.
Iberdrola sigue en sus trece. No muestra interés alguno en ceder o vender el poblado de A Chaira a pesar de la existencia de inversores interesados en recuperarlo con fines turísticos.
El alcalde de Pantón, José Luis Álvarez, aún piensa que hay margen de maniobra para conseguir poner en valor el lugar. Dice que si encuentra a un promotor que presente un proyecto de explotación viable se dirigirá de inmediato a Iberdrola para que formalice la cesión del complejo y que la administración local pueda, a su vez, firmar un convenio de apoyo con el emprendedor que se comprometa a recuperar las construcciones y darles uso un.
José Luis Álvarez señaló que hace algo más de un año el presidente de Iberdrola le confirmó que estaría dispuesto a la cesión; poniendo como muestra del interés sobre A Chaira e impedir su deterioro la instalación de una valla perimetral, la que ahora está reventada en al menos dos puntos.
