El Greco Galicia participa en otro golpe a los narcos con 2,4 toneladas de coca incautadas en un buque

Pocas horas después de la aprehensión de un mercante con 5,5 toneladas de cocaína en aguas de Ecuador con destino a las Rías Baixas, los agentes de la Comisaría de Pontevedra han participado en la interceptación de otro navío con un gran alijo, de 2,4 toneladas de coca, que fue trasladado a Las Palmas de Gran Canaria. Una operación conjunta con la Deanorteamericana, la NCA británica y la Policía de Portugal se ha saldado con siete detenidos y las citadas sustancias incautadas.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha destacado la importancia de las dos operaciones, "de las mayores de la historia". La Policía piensa que el destino final de la droga era, en ambos casos, Galicia.

LA OPERACIÓN. El pesquero venezolano con 2.400 kilos de cocaína a bordo capturado por las fuerzas de seguridad españolas fue interceptado por el buque Petrel en aguas de Martinica, el departamento francés situado en el Caribe.

El Cuerpo Nacional de Policía y la Agencia Tributaria han conducido al pesquero y a sus siete tripulantes, todos ellos venezolanos, a la base de la Armada en Las Palmas de Gran Canaria, donde este luneses se han descargado los fardos de cocaína que transportaba en sus bodegas, en una operación supervisada por el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.

Las pesquisas se iniciaron al tener conocimiento de que una organización de origen suramericano y afincada en España estaba preparando el envío de una gran cantidad de cocaína hacia este país. El pesquero con los 2.400 kilos de cocaína fue localizado en marzo, aunque su abordaje por parte de integrantes del Grupo Especial de Operaciones de la Policía Nacional, embarcados en el buque Petrel, no se produjo hasta el pasado 4 de mayo.

El pesquero fue localizado a unas 1.000 millas aproximadamente de Martinica (1.850 kilómetros), pero cambió el rumbo inicial, por lo que fue perseguido por el Petrel, hasta que se dieron las condiciones adecuadas para su abordaje, en la madrugada del 4 de mayo, sin que los detenidos ofrecieran resistencia a pesar de que en la bodega había una pistola junto a la cocaína, ha señalado Ortega. Asimismo, ha informado de que la droga, distribuida en 80 fardos, tenía por destino el mercado europeo.