El repentino fallecimiento de Manuel Arias Viña causó una gran consternación en su familia y en todos cuantos lo conocían, que eran muchos. La inesperada noticia llenó de pesar la parroquia de Vilalvite (Friol), en donde este miércoles se han oficiado el funeral y la inhumación del cadáver. Pero éste no es el único lugar en el que se siente profundamente la desaparición de Manuel Arias, pues en otras localidades de la provincia de Lugo, incluida la ciudad, también era conocido debido a su trabajo como albañil.
Manuel Arias, que encontró súbitamente la muerte a los 52 años, siempre había trabajado en la construcción. Hasta hace unos meses desempeñaba su labor en Mahía y en la actualidad lo hacía en Construcciones A Piunca. Tanto en una como en otra empresa dejó una profunda huella, pues tenía muy buena relación con sus compañeros.
Casado con Montserrat Conde Varela, que trabaja en el Grupo Ingapán, Manuel Arias deja un hijo, Álvaro Arias Conde. A ellos quiere El Progreso mostrar su pesar, así como a los padres del fallecido, Jesús Arias Cruz y Arbolina Viña Ferro; y a sus hermanos, Isabel (empleada de Gadis), María Luisa (propietaria de Quesería Arcadio) y Ángel (propietario de Carnicería Ángel).
