A vueltas con el pacto

bastó con que el conselleiro de Medio Ambiente, Infraestructurras e Territorio, Agustín Hernández, no invitase el pasado sábado a socialistas e independientes de Ribadeo a la presentación de un programa de recuperación integral para Rinlo para que estos se echasen a la yugular de populares y nacionalistas para insistir en que bajo su punto de vista el PP y el BNG mantuvieron a lo largo de este mandato una especie de pacto de gobierno oculto en Ribadeo. La cercanía de las elecciones municipales hace que el debate que hasta ahora fue algo no muy trascendente se convierta en un tema para no dejarlo correr.

1. ¿Por qué retomaron este tema PSOE y Upri?

El sábado la Consellería de Medio Ambiente, Infraestructuras e Territorio presentó un proyecto de inversión de 1,2 millones de euros en Rinlo. Fue invitado el alcalde, el nacionalista Fernando Suárez, como anfitrión. El enfado de socialistas e independientes nace de la presencia en dicho acto del candidato del PP, Manuel Valín. La ausencia de los demás fue mal acogida en las filas de Upri y PSOE. El candidato de este último partido, Eduardo Gutiérrez, asegura que la Xunta aplicó «a lei do embudo» para invitar sólo «a quen lle interesaba» porque, añadió, «non se trata igual a un socio que a un adversario». El candidato de Upri y portavoz municipal, Francisco Rivas, dice que en realidad «o que queren é seguir co mesmo goberno destes catro anos: o de PP e o Bloque, xa veremos en que orde». Gutiérrez dice que «para o Bloque o amigo é o PP» a pesar de que «as inversións da Xunta en Ribadeo son case inexistentes».

2. ¿Cómo se defendió el alcalde de esas acusaciones?

Ante el revuelo montado, Fernando Suárez tuvo que salir ayer a recordar que «o anfitrión do acto celebrado o pasado sábado en Rinlo era a Xunta e como tal tiña que actuar», ya que dice que si por él fuese «houbese invitado a calquera» y para marcar distancias apuntó que es «moi respectuoso coa Xunta, incluso cando non cumpren coas promesas realizadas, como ocorreu coa Torre dos Moreno».

3. ¿Qué dice el PP de esas acusaciones de pacto?

El portavoz del PP, José Carlos Rodríguez Andina, y también su candidato a la alcaldía, Manuel Valín, explicaron por activa y por pasiva que sus apoyos en votaciones plenarias al gobierno municipal del Bloque Nacionalista Galego fueron solo en temas muy concretos que era necesario impulsar por el bien de Ribadeo y para que el municipio no quedase cuatro años en inacción. Pero además, Rodríguez Andina les echa en cara que mientras ellos reiteran que hay un pacto entre PP y BNG, no dicen nada de las múltiples votaciones en las que socialistas e independientes se apoyaron mutuamente durante los últimos tres años y medio. «Si votamos a favor de algo del BNG es que tenemos un pacto, pero si ellos se apoyan mutuamente, entonces no, entonces es un apoyo puntual», comenta muy gráficamente el portavoz del PP.

4. ¿Recibió apoyos el Bloque Nacionalista Galego del PP durante este mandato?

A lo largo de este mandato hubo muchas votaciones en las que el PP apoyó propuestas del BNG, pero también muchas que votó en contra. Pero las que levantaron más polémica siempre fueron las que sirvieron para aprobar los presupuestos municipales. El PP los apoyó todos menos los últimos y entonces el BNG vinculó su aprobación a una cuestión de confianza, que superó. Otro momento crítico fue una visita de un responsable del Instituto Galego de Vivenda e Solo a las viviendas sociales del municipio en la que estuvo acompañado de Suárez Barcia y de Rodríguez Andina, pero no de Pérez Vacas o Francisco Rivas.

5. ¿Hubo enfrentamientos entre nacionalistas y populares desde 2007?

Los momentos más tensos están surgiendo precisamente ahora, y de rebote, incluso podría decirse que a causa del mal tiempo. Cuando en junio el puente de Arante quedó inutilizado, Xunta y Diputación se enzarzaron en una discusión que aún acaba de finalizar ahora sobre cómo repararlo. El alcalde exigió a ambos más diligencia en el tema, y Rodríguez Andina, como responsable de la Consellería de Cultura, tuvo algunos enfrentamientos con el alcalde. A partir de ahí, tuvieron varios desencuentros incrementados en los últimos días a propósito de la venta de la Torre de los Moreno, que dio a conocer Rodríguez Andina, o de la tramitación de ayudas en la Consellería de Cultura para restaurar dicho inmueble. Andina recuerda que si no se dieron fue sólo porque deben seguir una tramitación administrativa que aún no había finalizado.

6. ¿Tendrá un coste electoral esta situación?

Es difícil de calibrar, porque son dos partidos en las antípodas ideológicas y, si hubo algún pacto, en ningún momento fue tan escandaloso como para provocar una fuga de votos masiva ni en las filas populares ni en las nacionalistas. Si es que hubo algún desgaste, no fue en ningún caso tan grave, aunque como siempre la última palabra la tendrán los votantes.

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