En la cola del embalse del Eume, Vilarbó se convierte cada verano en un enclave paradisíaco para niños y mayores, que lo eligen como destino para participar en los campamentos que organiza la asociación Néboa.
Desde 1995, todos los meses de agosto, esta entidad destina el campamento a personas con discapacidad de toda Galicia, en una lucha, pese a la falta de apoyos, para potenciar la integración y el aprendizaje de decenas de personas.