Urdangarin niega su implicación en la malversación de dinero público

La declaración judicial de Iñaki Urdangarin, duque de Palma, ha concluido a las 1.37 de la madrugada de este lunes tras 21 horas de interrogatorio en el que ha respondido, durante todo el fin de semana, a preguntas sobre las presuntas irregularidades en la gestión del Instituto Nóos y el conglomerado de empresas creadas con su exsocio Diego Torres.

Al finalizar la comparecencia de Urdangarin, ni los fiscales anticorrupción, ni la acción popular, ni las acusaciones reclamaron al juez José Castro la celebración de una vistilla para pedir medidas cautelares contra el yerno del rey.  

La última tanda de declaraciones fue cerrada por el sindicato Manos Limpias, que inició su interrogatorio pasada la medianoche del domingo. Cerca de una hora después salía del juzgado su titular, José Castro, mientras que el duque de Palma permanecía en el interior, seguramente para leer y firmar su declaración.

Por su parte, Iñaki Urdangarin ha abandonado esta madrugada los juzgados de Palma a las 4.10 horas, después de repasar exhaustivamente durante más de dos horas y media la transcripción de la declaración que ha realizado durante el fin de semana ante el juez José Castro, instructor del caso Palma Arena.

El duque de Palma no ha hecho declaraciones al salir de las dependencias judiciales, donde ha sido interrogado a lo largo de 21 horas en las dos jornadas maratonianas de declaración de ayer y hoy.

Sí ha hablado su abogado, Mario Pascual Vives, que ha definido las declaraciones de su defendido de "muy intensas" y en las que ha quedado "absolutamente claro" que la infanta Cristina "nada tenía que ver", que Urdangarin atendió y siguió las instrucciones de la Casa Real y que no hay indicios de "ninguna cantidad que haya sido evadida al extranjero ni nada de paraísos fiscales".

El letrado ha destacado que Urdangarin ha respondido a "todas y cada una" de las preguntas que se le han formulado y ha dado "las explicaciones correctas" en contestaciones que "satisfarán todas las versiones que estaban pendientes de aclarar".

Pascual Vives no ha respondido a si aceptaría la posibilidad de que se celebre un careo entre Urdangarin y su exsocio Diego Torres, si el juez así lo solicita, por tratarse de "una cuestión procesal" y ha remarcado que para su defendido el procedimiento judicial "acaba de empezar".

Ante el hecho de que la declaración se haya prolongado tantas horas, Mario Pascual Vives ha defendido que "había que estar a todo lo que hiciera falta". "La colaboración con la Administración de Justicia ha sido y debe ser al máximo y entendemos que es lo que se ha estado haciendo", ha afirmado.

Ha añadido que no le consta que la Casa Real se haya quejado de lo prolongado de la comparecencia.

Pascual Vives ha justificado en la necesidad de repasar la transcripción, las dos horas y media que han dedicado a leerla y que ha hecho que su defendido y él salieran de los juzgados mucho después que los demás abogados, los fiscales y el propio juez, que han ido abandonado el juzgado de Via Alemania a partir de la 1.35 horas.

"Había que repasar, son 42 folios de declaración, había que hacerlo así y había que hacerlo hasta el final", ha asegurado.

Sobre el estado del duque de Palma tras el largo procedimiento judicial, ha afirmado: "Está cansado pero entiendo que ha cumplido con su deber y que ha hecho una buena declaración".

Pascual Vives opina que la declaración habrá convencido al juez de la inocencia de Urdangarin: "Yo creo que sí pero eso quedará en la mente interna de su señoría. Yo creo que ha contestado a todo y lo ha hecho esencialmente bien".

DESVINCULACIÓN DE LA INFANTA
En los dos días que estuvo declarando, Iñaki Urdangarin ha insistido en negar que haya ordenado, consentido o conocido la presunta malversación de fondos públicos que el juez instructor del caso Palma Arena, José Castro, y la Fiscalía Anticorrupción atribuyen al Instituto Nóos, que presidió de 2003 a 2006.

Desde que comenzó el sábado su comparecencia en los juzgados de la capital balear, el duque de Palma ha rechazado cualquier implicación en las supuestas irregularidades de Nóos, entidad sin ánimo de lucro; ha atribuido la responsabilidad de la gestión de las empresas investigadas a su socio, Diego Torres, y ha desligado de sus actividades profesionales a la infanta Cristina. El yerno del rey solo se ha declarado responsable de la administración de la empresa Aizoon, que tenía a medias con su esposa, según han indicado a Efe fuentes jurídicas.

FACTURAS SOSPECHOSAS

Ante las preguntas del juez Castro, que se han prolongado en total catorce horas y 20 minutos, Urdangarin ha confirmado que él administraba Aizoon y ha defendido la limpieza de su gestión. El instructor le ha preguntado sobre facturas sospechosas como una de 600 euros que sirvió para pagar a la empleada de hogar de la ayudante personal de Urdangarin, ante lo que el duque ha argumentado que necesitaba a su asistente todo el tiempo posible y para ello se aseguraba de liberarla de otras responsabilidades personales.

Durante la mañana de hoy, también ha hablado del momento en que dejó el Instituto Nóos, en el año 2006, por recomendación de la Casa Real y ha dicho que se le impusieron dos condiciones: que dejara sus actividades profesionales con entidades públicas y que abandonara sus negocios con Diego Torres. Asimismo, el marido de la infanta Cristina ha dicho al juez que no sabía de la existencia de la trama de empresas para desviar dinero público que se le atribuye a él y a su exsocio Diego Torres.

RED EMPRESARIAL VINCULADA
El instructor ha insistido en reclamarle información sobre su participación en esta supuesta red empresarial, que estaría formada por la citada Aizoon, Nóos Consultoría, el bufete Tejeiro, Virtual Estrategies, Intuit, Shiriaimasu y De Goes Center for Stakeholder Management, ante lo que el duque ha reiterado que desconoce la gestión administrativa y la facturación de estas sociedades. Al igual que ya hiciera ayer, ha recalcado que no llevaba la gestión de las empresas, sino que de eso se encargaba Diego Torres y los hermanos Miguel y Marco Antonio Tejeiro, cuñados de su exsocio, y ha asegurado no recordar algunos de los detalles por los que era interrogado.

El juez también ha preguntado a Urdangarin acerca de una factura por 400.000 euros que debía el Govern balear a Nóos por la celebración de un foro deportivo cuando el duque ya había dejado la presidencia de este organismo sin ánimo de lucro, en el año 2006, tras pedírselo la Casa Real. Ha reconocido que llamó en dos o tres ocasiones al ex director general de Deportes de Baleares José Luis Pepote Ballester, imputado también en la causa, con el fin de mediar para que se pagara a Torres, que le había sustituido en la presidencia de Nóos.

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