La proyección de Rey 547 Sonrrisa Sid parece que no tiene techo. La vaca, nacida y criada en la ganadería pastoricense Rei de Miñotelo -que ha arrasado en los tres últimos años del concurso de frisona de la Moexmu, en distintas categorías y ante distintos jueces-, se enfrenta ahora a un nuevo reto, el Campeonato de Europa, una cita trienal en la que estarán las mejores reses del continente. Será la única gallega entre diez españolas.
«Esto é o máximo o que se pode aspirar», dice su dueño, Alberto Iglesia, quien estuvo en este certamen morfológico a los 18 años, hace seis, como colaborador, ayudando con el ganado. Ahora regresará con su propio ejemplar, un logro detrás del que hay muchísimo trabajo y muy continuado.
Y es que la preparación para que Sonrrisa, que hace vida independiente, con dieta y cuidados específicos, y que superó varias pruebas como si de un atleta de élite se tratase, esté en junio «no seu mellor momento» se inició hace más de un año. Competirá en vacas intermedias -está en su tercera lactación- en la cita «máis importante de Europa». Será del 17 al 19 en Colmar (Francia), si bien la delegación que coordina Conafe estará del 12 al 20.
De la relevancia de la convocatoria también dan cuenta en Africor. Su gerente, Ramiro Fouz, destaca que se trata «dun concurso morfolóxico ao que van os mellores animais no seu mellor momento» por lo que solo obtener el pasaporte ya tiene mérito. Y Fouz además aclara que «non participar non quere dicir que non teñamos boas vacas». De hecho, pese a que hace años que no van vacas gallegas, una res de la ganadería Pozo de Lugo logró el premio de Vaca Joven Campeona representando a la granja italiana que la compró.
