El Ayuntamiento de Quiroga ha puesto todo su empeño en contar con una ruta geoturística, la primera de tales características que funcionará en Galicia. En tal proyecto trabaja desde principios de este año con la intención de que esta iniciativa esté lista para la próxima primavera.
La idea que tiene el alcalde quirogués, Julio Álvarez Núñez, es enseñar el plegamiento de Campodola, un pliegue sinclinal casi único en la Península Ibérica con una antigüedad cercana a los 500 millones de años; las canteras de pizarra existentes en Pacios da Serra y los restos de antiguos glaciares en la zona de A Seara. de hace 10.000 años.
Julio Álvarez indicó que el proyecto se enmarca dentro de un programa en el que participan programas Leader de otras comunidades autónomas. Así, señaló que se trabaja en su diseño y que para esta actuación se dispone de una subvención de 10.000 euros.
La ruta se completará con un museo y a la vez aula de interpretación que se construye en la villa quiroguesa con piedra de la zona aprovechando el material que el Ayuntamiento retiró de casas derruidas.
«En este espacio, además de divulgar la riqueza geológica, se prestará especial atención a los ecosistemas característicos de la comarca, repasando elementos como la flora y la fauna», añadió Álvarez.
El alcalde manifestó que cuenta con la colaboración de la cátedra de Geología de la Universidad de A Coruña para dotar de contenido este centro.
Campodola
El plegamiento de Campodola es el punto de la ruta más interesante para los aficionados a la geología. La revista científica internacional Journal of Structural Geology publicará las investigaciones realizadas por un equipo de geólogos y matemáticos de la Universidad de Oviedo.
Estos científicos han elaborado un modelo que reproduce los movimientos de la corteza terrestre que dieron lugar a la formación de este pliegue, originado a consecuencia del choque entre dos antiguos continentes, Gondwana y Euramérica, que se unieron para formar el supercontinente Pangea.
El estudio ha determinado que el proceso de formación del plegamiento tuvo lugar durante en el período Carbonífero. En esa época, los continentes estaban cubiertos en gran parte por bosques de helechos gigantes.
Lo que se observa en Quiroga es la parte más visible de una enorme estructura de más de cien kilómetros de largo que se extiende desde la sierra de O Courel hasta el Alto del Morredero, en la provincia de León. Las fuerzas provocadas por la colisión de los mencionados continentes hicieron que las capas de roca se levantasen y doblasen.
Formadas por pizarra y cuarcita, este último un material de considerable dureza, los investigadores han determinado que la gran presión que sufrieron las rocas hizo que se calentasen a más de 300 grados centígrados, con lo que adquirieron una considerable elasticidad.
Ruta del oro
El Ayuntamiento también ha decidido apostar por el turismo de la naturaleza tras comprobar, según declaró el alcalde, que esta modalidad cada vez cuenta con más adeptos. En la actualidad, quien se acerque hasta este municipio del sur lucense tiene la posibilidad de realizar hasta once rutas.
Una de ellas es la del oro, con una ineludible visita al túnel de Montefurado, construido por los romanos en el siglo II en la Pena do Corvo, donde se hizo un agujero en la roca de 120 metros de longitud, 19 de ancho y 17 de alto para desviar el cauce del río unos tres kilómetros y aprovechar el oro que quedaba en el lodo de la cuenca.
El túnel, pese a sus dimensiones y a su vistosidad, es sólo el vértice de una zona que en la época romana se dedicó de lleno a la explotación aurífera, al igual que se hacía en las ahora cercanas Médulas leonesas e incluso en varias minas que están ocultas bajo las montañas de O Courel.
Desde el Ayuntamiento de Quiroga se coordinaron varias iniciativas encaminadas a promocionar su particular El Dorado.
Primero acondicionó una ruta de siete kilómetros y dificultad media que recorre los principales puntos de actividad minera relacionada con la extracción del oro de la zona. Pero, recientemente se concluyó el acondicionamiento del acceso al gran túnel de Montefurado. Además, a poco más de dos kilómetros, en la población de Anguieiros, se levantó un mirador que arroja una instantánea privilegiada de toda la cuenca aurífera del Sil.
El proyecto incluyó, además, el acondicionamiento para su visita de otro túnel romano cerca de Paradaseca, que tiene unos veinte metros y era parte de las explotaciones auríferas del río Soldón.
Entre las montañas del municipio están catalogadas un total de 23 minas de oro. Las más importantes con las minas de A Toca o la de Toribio, situadas cerca de Piñeira, en Seoane do Courel, pero también están catalogadas las de A Canda, Cortas de Eiriz, Herrería Vella, Os Pitoucos, Fontabrán, O Comuneiro, Os Buracois, O Carozo, Cova do Penedo, A Veneira, Banzado dos Castros, Burreiras o A Borneira. entre otras.
La oferta turística se completa con el museo etnográfico, que ocupa 600 metros cuadrados en el bajo del auditorio municipal.
En varias salas se muestran oficios tradicionales y sectores productivos que aún hoy tienen enorme importancia en el municipio, como la elaboración de vino y aguardiente, la recolección de la miel, la elaboración de aceite o la industria de la pizarra. El museo, inaugurado en el año 2007, abre sus puertas los sábados, domingos y festivos.
Camiño de Inverno
Los dirigentes de los Grupos de Desenvolvemento Rural (GDR) Terras de Compostela, Terras do Deza, Miño-Ulla, Ribeira Sacra y Valdeorras, así como la Asociación para el desarrollo da comarca berciana (Asodebi) decidieron hace tres meses trabajar conjuntamente para promocionar el denominado Camiño de Inverno, «con la finalidad de lograr que se homologue como ruta oficial jacobea», según señaló el gerente del grupo Ribeira Sacra.
Esta ruta tiene sus tramos más interesantes entre los municipios de Quiroga y Ribas de Sil, recorridos este año por el presidente de la Diputación de Lugo con el fin de promocionar este camino alternativo a Santiago.
Realizar una cartografía exacta del camino, completar la señalización y publicitar la ruta con folletos y congresos fueron algunas de las ideas expuestas.
Los colectivos volverán a reunirse para elaborar un proyecto interterritorial común y presentarlo ante el Ministerio de Medio Ambiente con el objetivo de conseguir financiación para llevar a cabo todas estas propuestas.
- El valor añadido del aceite. El Ayuntamiento de Quiroga cuenta desde hace años con una ruta que denomina del aceite y que conduce al visitante entre olivos centenarios hasta una antigua almazara situada en Bendilló, donde una vez al año se celebra una fiesta de exaltación de un producto cuyo nombre, aceite de Quiroga, ha sido registrado por la administración local.
- Estudio. El Grupo de Desarrollo Rural Ribeira Sacra ha comenzado a dar los primeros pasos para sacar del aceite de Quiroga un valor añadido. Tras destacar los beneficios que tiene sus consumo ha apostado por el resto de sus propiedades, tales como hidratantes para piel, cabello, uñas y cutículas, así como de protección de labios y calmante de las manos, entre otras. Todo ello se consigue de mejor manera a través de cremas, en las que también el vino puede jugar un papel fundamental si se aprovechan los polifenoles que se consiguen a través de las semillas y pulpa. Ahora se trata de convencer a particulares a emprender una línea de negocio en este sentido.
