Las valiosas pinturas localizadas en la iglesia sarriana de Santa María de A Pena a raíz de un derrumbe en el templo recibieron ayer la visita de una restauradora del departamento de Patrimonio de la Xunta, quien se encargó de analizar el conjunto mural como paso previo a su puesta en valor.
La especialista tomó fotografías y realizó mediciones para elaborar un informe en base al cual determinar los pasos que se darán en la recuperación de los murales. El delegado de patrimonio histórico de la Diócesis de Lugo, César Carnero, quien también estuvo presente en el examen de las pinturas, explicó que la primera actuación consistirá previsiblemente en la consolidación del conjunto, para lo cual será necesario «fixar os morteiros de cal para evitar deste xeito que as pinturas se perdan».
