Una quema de rastrojos fue el origen de un incendio que se produjo en el interior de una bodega de Goián, en el municipio de Pantón, y que afectó al techo y a parte de la estructura de la construcción.
El fuego se inició sobre las 9.30 horas, cuando el propietario de la bodega quemaba en el interior de la misma los restos de unas vides secas.
El hombre perdió el control de las llamas, que con rapidez se propagaron por el techo de la bodega, hecho a base de madera.
En las inmediaciones del edificio se encontraban varios vecinos que estaban de vendimia y fue su rápida intervención la que evitó que el fuego se extendiese a otras bodegas y casas del pueblo. Desde una fuente próxima transportaron cubos de agua con los que apagaron el fuego y posteriormente fueron apoyados con una motobomba que había sido alertada por el propio alcalde.
El regidor, José Luis Álvarez, apuntó que los medios que hay en la zona para los casos de incendio son muy precarios y que ayer, de no ser por la intervención vecinal y la proximidad de la fuente, se pudo fraguar una desgracia, ya que las llamas pudieron extenderse por todo el pueblo.
